Van pasando los días y el presidente de la República, Gustavo Petro, aún no se reúne con el alcalde electo de Bogotá, Carlos Fernando Galán, en la Casa de Nariño, situación que empieza a generar preocupación por la trascendencia de ese encuentro para el futuro de proyectos clave para la capital del país como la primera línea del metro.
El pasado 29 de octubre Galán, ganó la Alcaldía de Bogotá con más de 1 millón 490 mil votos, derrotando al exdirector del Dane Juan Daniel Oviedo, quien ocupó la segunda casilla con 614.233, el 20,1 % del total de sufragios; en la tercera posición quedó Gustavo Bolívar, el candidato del presidente Gustavo Petro, quien obtuvo 571.591 votos, el 18,7 % de los votos.
Galán le dio una “paliza” al proyecto político de Petro del Pacto Histórico, derrotándolo en las urnas.
La demora obliga a ver qué pasó con los anteriores políticos que ganaron la Alcaldía de Bogotá, ejercicio que hizo SEMANA; por ejemplo, en el caso de Enrique Peñalosa, tuvo su primer encuentro con el entonces presidente Juan Manuel Santos el 26 de octubre de 2015.
Y la saliente alcaldesa de Bogotá Claudia López fue recibida por primera vez por el entonces presidente Iván Duque el 29 de octubre de 2019.
Galán completa 10 días como alcalde electo de Bogotá y aún el presidente Petro no se ha reunido con él, pero sí le lanzó la primera pulla sobre la primera línea del Metro de Bogotá.
Parece que el Metro de Bogotá le va a traer ‘canas’ al alcalde electo de la capital del país, Carlos Fernando Galán, ya que lanzó el primer dardo el presidente de la República, Gustavo Petro, el cual ha insistido en que el megaproyecto tenga un tramo subterráneo.
En ese sentido, el mandatario colombiano no pasó por alto una declaración que dio Galán al término de un encuentro que sostuvo con la saliente alcaldesa Claudia López, donde pidió “respetuosamente” al Gobierno nacional no replantear el diseño original del metro.
“Qué tontería. Mi gobierno no ha hecho nada para que no hagan el metro elevado, pero en nueve años no lo ha hecho. Quien presentó la propuesta de integrar el metro elevado con un tramo de metro subterráneo como el que estudiamos fue la alcaldesa, pero después nos insultó por acoger su propuesta”, publicó Petro hace varios días en su cuenta personal de X.
Y agregó en el mensaje: “Que las generaciones posteriores los recuerden por hacer ese esperpento, pero si no lo han hecho en estos nueve años, no es porque nosotros lo hayamos impedido”.
La molestia del jefe de Estado con Galán fue por una declaración en la que afirmó que respetará el mandato popular que le otorgaron los ciudadanos de Bogotá por su elección a la Alcaldía.
“Mi discusión con la Nación va a ser siempre a través de canales institucionales, respetuosa, con el presidente de la República, pero también tenemos que exigir un respeto por la autonomía de Bogotá, por la autonomía territorial, porque Bogotá define un proyecto, lo impulsa y lo saca adelante y no debe la Nación entrar a que se replantee ese proyecto”, dijo Galán.
Y aseguró finalmente: “Es solamente un ejemplo, porque vendrán discusiones seguramente con el Gobierno nacional en muchos frentes, pero la responsabilidad mía será defender los intereses de Bogotá y la institucionalidad de Bogotá que representa, a partir de un mandato popular, esos intereses”.