Aún continúan los conceptos enfrentados entre el Gobierno nacional y la Alcaldía de Bogotá por el metro de la capital del país. En esta ocasión, el presidente de la República, Gustavo Petro, volvió a plasmar varios reparos a la megaobra de movilidad.
Por medio de su cuenta personal de Twitter, el mandatario colombiano fue directo en alertar que sería un error pensar que el metro elevado pase por una de las zonas más densas de Bogotá.
De la misma manera, el jefe de Estado advirtió que si se insiste en esa posibilidad, podría traer como consecuencia que la ciudad tenga que pagar ese error durante un siglo.
“Pasar un metro elevado por el área más densa de la ciudad será un error que le costará un siglo a la ciudad de Bogotá”, trinó Petro.
Además, dijo: “Se construyó una propuesta común con la alcaldía para evitarlo, se espera concepto de la sociedad de ingenieros, asesor legal del gobierno en estas materias”.
Sin embargo, en abril del 2023, llegaron a Colombia tres elementos fundamentales para la construcción del viaducto de la primera línea del Metro de Bogotá, luego de una larga travesía por el océano desde un puerto de China.
La administración distrital calificó la llegada del material como “un nuevo hito para el proyecto”, que facilitará la instalación de los soportes de las vías por donde pasarán los trenes del primer segmento.
Se trata de tres imponentes piloteadoras de hincado a presión que, junto a sus contrapesos, suman 361 piezas y 3.273 toneladas de peso, cuyos diseños fueron exclusivos para la capital de Colombia.
De acuerdo con varias informaciones, “los estudios y diseños de detalle de las obras principales de la primera línea del metro están prácticamente finalizados y con eso la Empresa Metro de Bogotá (EMB) le dará luz verde al consorcio chino Metro Línea 1 para que arranque la construcción del viaducto por el que se desplazarán los trenes”.
El anuncio lo hizo este martes 25 de julio la alcaldesa Claudia López, en el patio taller en Bosa, “al que asistirán, por supuesto, el gerente de la EMB, Leónidas Narváez, y directivos de la interventoría y de ML1″, señala el medio.
Destacan que “con corte al 15 de julio, según información de Metro Línea 1, el ítem de estudios de ingeniería y diseños de detalle principales no objetados está en un 84 %, el 5 % se encuentra en revisión y el 11 % en ajustes. La ejecución del proyecto en general está en cerca de un 24 %”.
¿Cómo será el viaducto?
El mismo medio señala que “el viaducto tendrá una longitud de 23,9 km y 16 estaciones, comenzando en Bosa y pasando por las avenidas Villavicencio y Primero de Mayo, para tomar la Caracas hasta la calle 72. El recorrido completo de los 23,9 km se podrá hacer en tan solo 27 minutos”.
“En la intersección de la calle 72 con Caracas, está proyectada la conexión con la segunda línea, a Suba y Engativá, que será subterránea”, señalan varios medios de comunicación.
La segunda línea del Metro de Bogotá, que beneficiará a cerca de 2,5 millones de habitantes, conectará las localidades de Suba y Engativá con el centro de la ciudad; así, las familias tendrán más tiempo para compartir y menos tiempo para el trancón, sustenta el proyecto.
El servicio operará en las localidades de Chapinero, Barrios Unidos, Engativá y Suba, lo que supone 15,5 kilómetros y 11 estaciones. La obra generará más de 11.000 empleos.
Cierres viales
Frente a la postura del presidente Gustavo Petro de que gran parte del trazado sea subterráneo en vez de elevado, tal cual está contratado, el consorcio chino ha venido adelantando obras, como las que tienen que ver con el intercambiador vial de la calle 72 con avenida Caracas, al norte de la ciudad.
Se trata de la construcción del paso a desnivel que eliminará el cruce semafórico y les dará continuidad a los flujos vehiculares que circulan por esta importante vía, priorizando el servicio de TransMilenio a nivel, dándole paso al viaducto del Metro.
Para continuar su construcción, a partir de las 10:00 p. m. del lunes 24 de julio y por seis meses, la Secretaría Distrital de Movilidad autorizó el Plan de Manejo de Tráfico (PMT), que consiste en el cierre total de las dos calzadas occidentales de la avenida Caracas a la altura de la calle 72.
Esto conlleva al cierre del paso peatonal en el costado norte de la calle 72. Los peatones podrán hacer uso de los cruces peatonales con semáforo ubicados en las calles 73 y 70 A.
La operación del sistema TransMilenio en sentido norte-sur operará en contraflujo entre las calles 73 e inmediaciones de la calle 72, sin presentar afectación en sus rutas. La circulación en sentido sur-norte no se verá afectada. El acceso a la estación continuará realizándose por la calle 70 A.
Por su parte, todos los vehículos diferentes a los buses de TransMilenio que transiten por la Caracas en sentido norte-sur deberán tomar el desvío habilitado después de la calle 72 A, bajar hasta la carrera 14 A (vía paralela a la Caracas) y retomar la Caracas por las calles 71 A o 71. El tránsito que circula en sentido sur-norte no será afectado y continuará circulando de manera habitual.