Con la mirada puesta en los primeros 100 días de gobierno del Pacto Histórico, el presidente de la República, Gustavo Petro, lidera la primera Asamblea General de Gobierno, la cual se desarrolla este viernes 4 de noviembre en la hacienda Hato Grande en Sopó.
En el encuentro de alto nivel acompañan al jefe de Estado más de 100 funcionarios, entre directores de entidades, directores de departamentos de gobierno, viceministros, ministros, entre otros, haciendo un repaso de cómo vienen avanzando las políticas de justicia social, lucha contra el cambio climático y paz total, pilares del Gobierno nacional.
“Reunido en Hato Grande, Cajicá, con más de 100 funcionarios del más alto nivel en la primera Asamblea General de Gobierno”, trinó Petro.
De la misma manera, el presidente Petro definirá las prioridades para la ejecución del recaudo de la reforma tributaria, que fue aprobada esta semana en el Congreso de la República.
El gasto se destinará, en primer lugar, a la educación. El presidente ya había dicho hace unos días que ese sería su objetivo. Señaló de manera tajante que el termómetro de su gobierno será el acceso que los jóvenes puedan tener al sistema. “El programa se debe medir es con la educación, con el ingreso a la educación, ahí quiero medir si avanzamos o si fracasamos, no en el precio del dólar exactamente, ni en la magnitud de la codicia ni en la corrupción que crece y debemos detener”, sostuvo Petro.
El segundo tema es el acceso al agua potable. Gustavo Petro es uno de los mayores defensores de la protección del agua, por encima de los intereses económicos. Se ha pronunciado recientemente sobre casos emblemáticos; por ejemplo, dijo que el páramo de Santurbán debía protegerse frente al histórico interés de los mineros de sacar oro de allí.
En último lugar estará el fortalecimiento de lo que él llama la “banca pública”. Desde la campaña, el presidente ha dicho que la banca pública debe competir con la privada.
Ha manifestado que no desconoce la importancia del sector financiero en la economía, sino que, por el contrario, podrían ayudar mucho, por lo cual los invitó a “construir la manera en que puedan servir en la generación de riqueza”. Al sector privado le ha pedido que ayude a financiar la producción del país y a democratizar los créditos.
De la misma manera, el mandatario Petro revisará con lupa el avance de la política de paz total, en la cual definirá con qué grupos armados al margen de la ley se puede iniciar un proceso de acogimiento o, por el contrario, de paz, como en el caso de la guerrilla del ELN.
Cabe recordar que el pasado 30 de septiembre, también en Hato Grande, se realizó un ajuste en la estrategia de comunicación, puntualmente en la entrega del mensaje sobre el cambio que propuso en la campaña el presidente Gustavo Petro.
Al término de esa reunión, el presidente Petro manifestó que espera que lo critiquen por hacer el cambio prometido y no por no hacerlo.
“El engranaje del Gobierno es fundamental. Además, su coherencia, a pesar de la diversidad de los asuntos que cada ministro y ministra tiene que tener todos los días, como su agenda laboral. Aquí logramos unificar, volver coherente un mensaje que sigue siendo el mismo por el cual nosotros llegamos a ser Gobierno, el cambio”, señaló en ese momento el presidente Petro.
También indicó: “Aquí el eje central de la actividad del Gobierno, lo que le da la coherencia, es que vamos a cambiar el país y vamos a cambiar políticas públicas, vamos a cambiar concepciones para el siglo XXI y concepciones que ya no sirven”.
“Colombia potencia mundial de la vida es posible si tenemos un gobierno y una sociedad del cambio. El legado que queremos dejar al final de este esfuerzo, la coherencia que queremos construir en el día a día, es ese eje vertebral entre un gabinete diverso, ese es el cambio”, concluyó Gustavo Petro.