En medio de la visita de Estado que está desarrollando el presidente, Gustavo Petro, en México, en donde participó de la posesión de la nueva presidenta de ese país, Claudia Sheinbaum, el mandatario colombiano hizo referencia a un caso que tiene en alerta a las autoridades.
Por medio de su cuenta personal de X, antes Twitter, el jefe de Estado, dio a conocer que solicitó al gobierno de México, apoyo para ubicar a seis jóvenes que permanecen desaparecidas en ese país.
“Le he solicitado al gobierno mexicano el mayor apoyo para encontrar a las seis jóvenes colombianas desaparecidas en este país”, posteó Gustavo Petro.
A su turno, el consulado de Colombia en México expresó en un comunicado: “Referente al caso reportado en las últimas horas en que al parecer seis colombianas se encuentran secuestradas, este Consulado General, en el marco de las competencias consulares conferidas por la Convención de Viena de 1963, una vez tuvo conocimiento de la situación, activó todos los protocolos de localización y trabaja en conjunto con la Fiscalía General del Estado de Veracruz, quienes se encuentran en labores de búsqueda de las connacionales”.
“Del mismo modo, se han recibido testimonios de varios familiares, los cuales se han puesto a disposición de las autoridades con el fin de que puedan ser elementos que den con su paradero y posterior rescate”, se desprendió del documento.
Y finalizó el documento del consulado: “Seguimos trabajando de la mano con las autoridades veracruzanas para ubicar a las connacionales y esperamos que puedan retornar sanas y salvas a nuestras connacionales a casa”.
El caso de las colombianas desaparecidas
Seis colombianas fueron reportadas como desaparecidas en México por sus familiares, quienes tras casi una semana sin saber de ellas, dijeron sospechar que fueron secuestrados por miembros del crimen organizado.
Las jóvenes, de entre 20 y 26 años, se encontraban en Boca del Río, en el estado mexicano de Veracruz, y llegaron al país en los últimos cuatro meses para, según sus familiares, realizar trabajos sexuales. El último contacto que tuvieron con sus parientes fue la noche del 24 de septiembre.
Ninguna autoridad de México o de Colombia ha confirmado hasta el momento que haya una investigación abierta o denuncia por la desaparición. The Associated Press (AP) consultó con la Fiscalía General mexicana, así como con la fiscalía estatal de Veracruz, con la Embajada de Colombia en México y con la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas, sin obtener respuesta hasta el momento.
Las seis mujeres son jóvenes procedentes de entornos empobrecidos de Medellín y Los Patios. Dos de ellas son madres solteras y, al menos, tres viajaron a México por primera vez por trabajos sexuales, de acuerdo con los familiares de cuatro de las mujeres. No se conocían entre ellas antes.
Los hermanos de dos de ellas y las madres de otras dos contaron a la AP que en la última comunicación les avisaron que tres de las chicas acudirían a un servicio la noche del 24 de septiembre y dos se quedarían en la casa donde pernoctaban en Boca del Río.
Al no volver a tener contacto con ellas por varias horas, sus familiares localizaron a una mujer, conocida como alias Lilith o La Señora —contacto por el que viajaron a México— y ella solo les informó que las mujeres fueron retenidas, junto a un chofer, por un grupo del crimen organizado debido a una deuda.
De acuerdo con los familiares, quienes reconocieron que las jóvenes se trasladaron a México para realizar trabajos sexuales y por eso no denunciaron la situación en su momento, al llegar al país les fueron retirados los pasaportes y se les impuso una deuda de unos 4.500 dólares. Ese monto cubría los vuelos y la seguridad de las mujeres. A su llegada, eran trasladadas a una casa para vivir y debían trabajar hasta saldar la deuda.