En una agenda regional que adelantó el presidente Gustavo Petro en Domingodó, en el departamento del Chocó, lanzó una propuesta a miembros del Clan del Golfo para que se consolide un pacto por la paz.
En un discurso que dio en un evento público, el mandatario colombiano dijo que ese pacto podría transformar ese tipo de estructuras criminales, para que dejen el “traqueteo” y puedan volverse “industriales”.
“Hay que hacer un pacto. Todo esto es posible hacerlo, no de la noche a la mañana, siempre tendrá problemas, pero el pacto es que no nos matemos más, porque en medio de los cementerios no se construye ningún canal, ni ningún centro agroindustrial, ni ninguna riqueza, solo pobreza y miseria. Aquí debe haber miembros del Clan del Golfo. Yo les mando la razón, llegó la hora de la paz, no la hora de la viveza, como ya me ha ocurrido en otros lugares del país. Llegó la hora de la paz”, explicó Petro.
Además, afirmó: “Lo que yo estoy viendo aquí es una riqueza por generaciones hacia adelante, que el traqueteo, que el sicariato, que la muerte. Ya llevamos tres generaciones de muertos, encima todos, y vamos a continuar de aquí en adelante”.
“Eso no deja nada, sino la tristeza, la nostalgia, la destrucción humana. Yo les propongo ya comenzar a trabajar el tema, dejar de ser traqueto y volverse industrial, ¿por qué no? Dejar lo que nos persigue y nos hace vivir en la sombra de manera permanente, que si se le entrega la plata al policía o al juez o no, que si se corrompe el Estado, que si el Estado traiciona y se los lleva a presos, o, peor aún, como sucedió en el pasado, que la región se vuelve una violación permanente de derechos humanos. La orden que el comandante en jefe de las Fuerzas Militares ha dado al Ejército, a la Policía, es el mayor respeto a los derechos y libertades del pueblo campesino y trabajador de Colombia”, insistió Petro.
También indicó en su intervención: “Viejas épocas no pueden volver. El honor militar se mide a través del respeto de la ciudadanía. No son litros de sangre, como decían antes, son litros de derechos y libertades, porque la unión entre pueblo y Ejército es la base de la nación”.
“Las armas del pueblo son las armas de la Constitución y una nación puede vivir en tranquilidad y progresar a través de todas estas cosas que hemos visto hoy. Si somos capaces de vivir en paz, si somos capaces de respetarnos, si somos capaces, como la mayoría de los pueblos del mundo, de convivir en tranquilidad. Así que a esos jóvenes o no tan jóvenes que andan en ese tipo de grupos les digo: hermanos, hermanas, ese negocio los va a acabar”, recalcó.
Lo particular de esa propuesta es que la hizo el mandatario colombiano luego de entregar al país 9 puntos sobre su “constituyente”, en la cual está consagrado el “perdón social”, el cual generó un profundo revuelo en campaña presidencial. Cuando Petro lo mencionó, luego se denunció el pacto de La Picota.