La trascendental determinación que adoptó la Corte Constitucional, de bajar de 1.300 a mil las semanas de cotización a pensión de las mujeres no pasó desapercibida por el presidente de la República, Gustavo Petro, quien envió un mensaje directo sobre esa decisión del alto tribunal.
El mandatario colombiano, por medio de su cuenta de Twitter, envió un mensaje directo destacando la medida que reveló la Corte Constitucional que genera un alivio para las mujeres y su proceso de pensión.
De la misma manera, el jefe de Estado aprovechó esa determinación de los magistrados para asegurar que su polémica reforma pensional es necesaria para su aprobación en el trámite que adelanta en el Congreso de la República.
“Me parece una excelente decisión de la corte constitucional que hace aún más necesaria la reforma pensional para poder financiar este gran logro de la mujer trabajadora”, trinó Petro.
En una crucial decisión, la Corte Constitucional declaró inconstitucional la exigencia de 1.300 semanas de cotización para que las mujeres obtuvieran la pensión de vejez. El alto tribunal fijó como plazo el 31 de diciembre de 2025 para que sea el Congreso, en coordinación con el Gobierno, el que adopte un régimen de causación del derecho a la pensión de vejez en el que se considere integralmente el enfoque de género y, especialmente, la condición de las mujeres cabeza de familia.
En el fallo se determina que a partir del primero de enero de 2026 y, si el Legislativo no adopta dicho régimen, se disminuirán gradualmente las semanas de cotización hasta llegar a mil. La Corte, con ponencia del magistrado Juan Carlos Cortés González, estudió la demanda presentada en contra de un artículo clave de la ley 797 del 2003, que fijaba el número de semanas que debía cotizar la mujer.
En la acción judicial se reclamaba por el desconocimiento de la situación de la mayoría de las mujeres en el país que, por diferentes motivos -pobreza, conflicto armado, madres cabeza de familia, informalidad, entre muchos otros-, no podían cumplir estos requisitos, aumentando así la brecha social y económica que históricamente las ha marcado.
El demandante insistía en que el mencionado artículo desconocía el derecho de las mujeres a obtener una protección especial en el ámbito de la seguridad social, para garantizarles la igualdad material en el acceso a la pensión de vejez.
En el análisis jurídico se estudió si establecer un requisito uniforme de tiempo de cotización para hombres y mujeres, con el fin de acceder a la pensión de vejez en el régimen de prima media, quebrantaba los artículos 13 (igualdad), 43 (protección a la mujer y, en especial, a la cabeza de familia) y 48 (seguridad social) de la Constitución Política. Tras varias discusiones, se determinó que sí.
Esto teniendo en cuenta las evidencias frente a las barreras y obstáculos para que las mujeres accedan y se mantengan en el mercado laboral y puedan garantizar su derecho pensional, así como las condiciones de inequidad que experimentan las mujeres en la economía del cuidado, la informalidad, la vulnerabilidad y la exclusión, se exhortó al Congreso y al Ejecutivo para que adopten políticas y programas complementarios a la política pública pensional, que contribuyan a cerrar la brecha en la equidad de género, en especial, en lo referente al reconocimiento de la economía del cuidado y a la necesidad de proteger socialmente a quienes la ejercen.
Reforma pensional en Colombia: los trabajadores que tendrían que aportar más a pensión
Las pensiones han sido un tema de interés nacional y general durante los últimos años, especialmente por lo relacionado con los cambios que han sido propuestos por la reforma, que busca implementar el Gobierno Petro durante su actual periodo.
Esta reforma ha levantado fuertes polémicas y debates, e incluso hay hasta personas que no le ven futuro a este proyecto de ley, que sigue siendo tema recurrente en las Comisiones del Senado de la República.
Si bien el progreso de esta temática se ha visto algo detenido durante la última semana a causa de la constante cancelación del debate en la Comisión Séptima por la falta de quórum, es importante tener en cuenta los potenciales efectos que tendría esta reforma de ser aprobada.
Es clave recordar que el Gobierno nacional ante esta reforma posee las siguientes peticiones en concreto: que se traslade a Colpensiones solamente la cotización hasta un salario mínimo; que haya un compromiso, en la ley, que fije una gradualidad razonable para atender a todos los ancianos pobres con una renta que les permita estar por encima de la línea de pobreza; que a las personas que hoy están afiliadas al sistema no se les aumente el número de semanas, que hoy está en 1.150, para acceder a la garantía de Pensión Mínima; que tampoco se les aumente la edad para la devolución del dinero cuando no puedan pensionarse, y que se aplace el aumento de las cotizaciones, debido al reciente aumento de impuestos.
A su vez, esta reforma se ve unida a otras medidas propuestas de forma externa por el Gobierno nacional, como por ejemplo, el artículo dentro del Plan Nacional de Desarrollo (PND) que establece que los pensionados aportarán un 2 % de su mesada para el sector salud.
No obstante, el centro de algunas controversias se ha situado frente a la posibilidad de que se cambie la edad mínima para acceder a estas pensiones, pero también respecto a qué grupo de trabajadores debe aportar una mayor cantidad de su sueldo a este fondo de pensiones general.
De manera que, en caso de aprobarse la reforma, esto se repartiría de la siguiente manera: para aquellos trabajadores que tengan ingresen entre siete y 16 salarios mensuales, el aporte corresponderá a un 2,5 %; en el caso de quienes reciban entre 16 y 17 salarios mínimos, el aporte aumenta hasta un 2,7 %; mientras que para quienes perciban entre 17 y 18 salarios mínimos, este valor incrementará hasta el 2,9 %, y en caso de ser superior a los 18 salarios, el aporte ya alcanza un 3 %.
Si bien diversos partidos han mostrado su descontento ante la reforma en general, a comparación del resto de las reformas, esta muestra algunos puntos que permiten llegar a un acuerdo más igualitario, como es el caso del Centro Democrático, que aseguró que podría llegar a apoyar la reforma pensional, pero sólo si se logra encontrar un equilibrio entre las necesidades de los trabajadores más vulnerables y el resto de la fuerza laboral.
Mientras tanto, durante estas semanas venideras, se seguirá esperando que pueda llegar a darse el tan esperado debate en la Comisión Séptima, para así poder definir si la viabilidad de este proyecto es posible, o si finalmente acabará hundiéndose una de las reformas más controversiales del último tiempo en la política colombiana.