La Casa de Nariño está alistando los pormenores de la nueva salida al balcón que realizará el presidente de la República, Gustavo Petro, la cual se realizará, según el Gobierno nacional, el próximo lunes festivo primero de mayo a las 10:00 a. m.
El propio mandatario colombiano, a través de su cuenta de Twitter, reveló los principales ejes en los que girará su intervención desde el balcón del Palacio Presidencial, el cual se dará desde la Plaza de Armas, escenario que es el predilecto del jefe de Estado.
En el mensaje que publicó, hizo un llamado a los trabajadores del país para que se acerquen a la Plaza de Armas y atiendan el discurso que tiene preparado, en el que abordará la necesidad de que sean aprobadas las ponencias reformas que radicó en el Congreso de la República, salud pensional y laboral.
“Espero al pueblo trabajador en la plaza de armas del Palacio de Nariño a la 1 de la tarde. Vamos a hablar de estabilidad y derechos laborales”, trinó Petro.
Esta semana, en una agenda de trabajo que realizó desde Zarzal, en el Valle del Cauca, el presidente de la República, Gustavo Petro, encendió las alarmas por una fuerte declaración que dio ante la comunidad de esa región del país, discurso que generará varias reacciones de diferentes orillas políticas.
El mandatario colombiano, en un agitado discurso, hizo un llamado a la comunidad campesina a movilizarse para que se aprueben las reformas sociales que ha radicado su Gobierno en el Congreso de la República.
“Cuando le dijimos al pueblo del estallido social: cálmense que vamos a resolver esto por las buenas y en las urnas, pues el pueblo del estallido social fue a las urnas, se calmó”, sostuvo Gustavo Petro.
Y agregó en ese momento el jefe de Estado: “Pero ahora están burlando las decisiones de las urnas y eso no debe ser, hay una oportunidad aún tanto del Gobierno como de la sociedad colombiana para que –a través del diálogo y del pacto– se puedan hacer las reformas del cambio que incluyan a la sociedad colombiana”.
“Pero aquí se necesita decisión del Gobierno, audacia del Gobierno y se necesita un movimiento campesino que se levante en la dignidad de sus necesidades”, sentenció Petro.
Hace varios días, durante una entrevista con La Pizarra, el presidente Gustavo Petro volvió a referirse sobre las reformas que ha venido impulsando en su Gobierno, considerando que a la ciudadanía le ha faltado movilizarse para apoyarlas.
El mandatario se refirió sobre las tres principales reformas de su administración, las cuales ya fueron expuestas ante el Congreso de la República y se encuentran en debate. Estas son la laboral, pensional y de salud. En primer lugar, indicó que su bancada no cuenta con la mayoría en el órgano legislativo, lo cual implica que esta situación sea el primer obstáculo para las reformas.
“Construir una coalición mayoritaria, en donde nuestra fuerza es importante, pero necesita de otras que ya no son tan avanzadas, tan progresistas, que han estado más ligadas al pasado institucional y a las mismas reformas que yo pretendo cambiar. Ellos las aprobaron antes, ahora les he solicitado cambiarlas. Eso genera ya una dinámica un poco de conservación”, aseguró Gustavo Petro en la entrevista.
Sumado a ello, el mandatario afirmó que está alejado de las visiones radicales: “El radicalismo, en sí mismo, puede llevar a errores y ya uno metido en la tesis de la reforma, de ser reformista. En esa tensión, una reforma mantiene algunas cosas del pasado, que ojalá sean las mejores, y obviamente provoca una ruptura hacia el futuro”.
La perspectiva del mandatario no radica en abolir el capitalismo, sino que indicó que busca desarrollarlo sin la necesidad de tener un énfasis en la economía de mercado. “Esa ruptura tiene que ver, en todas las reformas que he presentado, con la superación del modelo neoliberal en lo que se refiere a las reformas sociales. Es decir, quitar la preponderancia del mercado, no abolirlo; poner más la preponderancia del derecho del ciudadano y de la ciudadana”, sostuvo el presidente en la entrevista.
De la mano con esa afirmación, el mandatario señaló que uno de los inconvenientes de Colombia radica en que hay un capital acumulado en un sector específico, lo cual lleva a la desigualdad en la distribución de recursos y en la acumulación de la tierra.
“Sin el Estado, no serían ricos, y eso ha hecho que pongan el Estado a su servicio y lo vuelvan muy antidemocrático, le quiten el poder a la gente, la excluyan, y el régimen que sale de ahí es un régimen de profunda desigualdad social y de un raquitismo capitalismo enorme, incluso permitiendo que relaciones de poder premodernas aún tengan muchísima preponderancia, como lo que ocurre con la tierra, que es otra reforma en curso: es una tierra prácticamente en manos del feudalismo”, apuntó finalmente Petro, al explicar la razón de por qué considera que esta situación es negativa para el país.