El proyecto de ley que busca regular el transporte aéreo de perros y gatos en territorio nacional superó su primer debate en la Comisión Sexta de la Cámara de Representantes. La idea del proyecto es poder reconocer a las mascotas como seres sintientes que no merecen ser tratadas como equipaje de bodega en un avión.
El proyecto, de autoría de los representantes Carlos Ardila y Julián López, del Partido Liberal y La U, respectivamente, busca exigir condiciones óptimas para los traslados aéreos de las mascotas. Serán, de acuerdo con el documento, “titulares de especial protección estatal a partir del reconocimiento de seres sintientes”.
En primer lugar, establece que se tiene que “evitar que sufran de hambre y sed, garantizar que no sufran injustificadamente malestar físico ni dolor, prevenir que le sean provocadas enfermedades por negligencia o descuido, asegurar que no sean sometidos a condiciones de miedo o estrés, y permitir que puedan manifestar su comportamiento natural”.
Y las autoridades del orden nacional deberán garantizar que los perros y gatos no sean transportados como equipaje. Además, no se podrá negar el servicio para estos animales, con contadas excepciones estipuladas por ley.
También, de aprobarse el proyecto en cuatro debates, habrá “bodega apta para mascotas”, la cual debe garantizar espacio y temperaturas similares a las de la cabina. También deberá tener aislamiento acústico y contar con supervisión del personal de la aeronave.
Todos los perros deberán volar en cabina, salvo aquellos de razas de manejo especial y cuyas proporciones sean demasiado grandes para estar cómodamente con su dueño.
“La Unidad Administrativa Especial de la Aeronáutica Civil, el Ministerio de Transporte y la Superintendencia de Transporte serán las encargadas de vigilar que las empresas de transporte aéreo cumplan con las condiciones establecidas para la bodega apta para mascotas y el contenedor apto para mascotas”, se lee en el proyecto.
En caso de que algo les pase a las mascotas por mala prestación del servicio, “la empresa será responsable de cubrir todos los gastos relacionados con su atención, tratamiento y recuperación veterinaria”. En caso de muerte, deberán encargarse de los servicios fúnebres.
Además, si el perro o el gato pesa de 1 a 12 kilos, su transporte será gratuito. Si pesa más que eso deberá pagar.
“Cuando el perro o gato doméstico pese de 1 a 12 kilos su transporte será gratuito, la mascota deberá permanecer sujetada y no requerirá guacal, y deberá viajar de la siguiente forma: cargado por su dueño o responsable, a los pies del asiento de su dueño o responsable, o debajo de la silla de en frente de su dueño o responsable. Cuando el perro o gato doméstico pese de 13 kilos en adelante, deberá permanecer sujetado, no requerirá guacal y su dueño asumirá los costos por su desplazamiento, que serán definidos por la empresa transportadora, donde se reconocen los gastos operativos, mantenimiento y otros factores específicos que inciden en la determinación de la tarifa”, agrega el proyecto.
El representante López comentó sobre la iniciativa: “Con esta ley, buscamos no solo proteger a nuestras mascotas, sino también educar a la sociedad sobre la importancia del bienestar animal. Es hora de que el transporte aéreo reconozca a los animales como seres sintientes y no como equipaje”.