Un balance agridulce de lo que ha sido el cumplimiento del acuerdo de paz con las Farc entregaron algunos integrantes del Partido Comunes en el aniversario número seis de la firma de lo pactado con la antigua guerrilla.

Tras la suscripción del acuerdo, en el Teatro Colón, a finales de noviembre de 2016, la antigua organización armada ilegal se convirtió en un partido político, el cual no ha tenido la fortuna que esperaban algunos sectores en el terreno político y electoral.

Primero decidieron denominarse Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (Farc) y, desde hace algunos años, cambiaron su nombre a Comunes. Sin embargo, sus votaciones en las elecciones que han participado no han sido elevadas y, por el momento, solamente han logrado elegir mediante voto popular un alcalde: Julián Conrado, en Turbaco (Bolívar).

Dos de los congresistas de este partido, el cual tiene derecho a 5 curules en Senado y 5 en Cámara hasta el 2026, hicieron un balance de lo que han sido los seis años de aplicación del acuerdo de paz, el cual, por sus palabras, tiene cosas buenas y malas.

El senador Ómar Restrepo, del Partido Comunes, afirmó que “Colombia no es la misma” y que se ha venido “avanzando en la generación de una cultura política y de participación en el país”, lo que ha permitido que los excombatientes se hayan desmovilizado “y llevar al Gobierno a alguien comprometido” con la paz. “Sin estos acuerdos no hubiéramos tenido a Gustavo Petro en la Casa de Nariño”, afirmó el congresista.

Restrepo agregó que el acuerdo también sirvió para “aumentar la presencia en el Congreso de las fuerzas alternativas y tampoco se tendría la cultura de la participación, que nos ha permitido avanzar y exigir las necesidades para llegar a una paz completa”.

“Necesitamos, eso sí, que se implementen los acuerdos de paz en su integralidad. La reforma rural integral que le entregue tierras a los campesinos, para que se distribuya y democratice la tierra y la formalice para quienes todavía no tienen títulos. La reforma política que amplíe y profundice la democracia en el país y se permitan todo tipo de expresiones, sin que sean violentadas”, afirmó el congresista.

Para el senador, también se requiere avanzar en la “sustitución de cultivos de uso ilícito” y que “se implemente en su integralidad y en su totalidad el punto quinto del acuerdo, para que las víctimas conozcan la verdad, sean reparadas y se supera la impunidad”.

El representante a la Cámara por Comunes, Pedro Baracutao, afirmó que en estos seis años de firmado el acuerdo de paz con el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos “no vemos los avances suficientes en la implementación” de lo pactado, especialmente en los territorios.

“Hay avances fundamentales y son en el cambio de la política del país”, dijo Baracutao, quien les hizo una invitación a los colombianos por una “lucha frontal para la implementación integral del acuerdo”.

El congresista afirmó que “esos seis puntos que quedaron en el acuerdo con fundamentales para empezar a solucionar los problemas que históricamente hemos tenido en el país”, y aseguró que con el desarrollo de lo pactado “comenzamos a avanzar hacia lo que el Gobierno nacional y el Congreso han denominado la paz total”.

“Sería el ejemplo idóneo para que quienes hoy están en el conflicto todavía puedan deponer las armas y convertirse en movimiento político, en el caso del ELN, si es que así lo quiere. Pero también que se puedan someter a la justicia aquellos otros actores que todavía persisten en la violencia”, afirmó el representante a la Cámara, quien agregó que se cumpla el “compromiso” del presidente Petro en esta materia.