Juan Fernando Petro, hermano del presidente Gustavo Petro, en el programa Los Informantes de Caracol, que dirige María Elvira Arango, hizo una revelación: que él y su hermano, el jefe de Estado, padecen el síndrome de Asperger.
“Cuando jóvenes éramos personas muy divertidas, cuando empezó la adolescencia hubo un cambio brutal tanto en él como en mí. El psicólogo dijo que teníamos el síndrome de autismo, de Asperger”, señaló Juan Fernando Petro, a la Nena Arrázola en el programa.
¿De qué se trata esta enfermedad? El síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo que se incluye dentro del espectro autista. Según la Confederación Asperger de España, “afecta la interacción social recíproca, la comunicación verbal y no verbal, una resistencia para aceptar el cambio, inflexibilidad del pensamiento, así como poseer campos de interés estrechos y absorbentes”.
De acuerdo con la página de la institución Johns Hopkins, el trastorno debe su nombre a Hans Asperger, un pediatra vienés que, en 1944, describió por primera vez un conjunto de patrones de comportamiento presentes en algunos de sus pacientes, mayoritariamente de sexo masculino. Asperger observó que, si bien estos niños tenían una inteligencia y un desarrollo del lenguaje normales, “presentaban serios problemas en las aptitudes sociales, no podían comunicarse bien con otras personas y tenían problemas de coordinación”.
Agrega la información de esta institución que es posible que el síndrome de Asperger aparezca más tarde que el autismo típico o, al menos, se lo detecta más tarde. A muchos niños se los diagnostica después de los tres años y la mayoría de ellos recibe el diagnóstico entre los cinco y los nueve años de edad.
“El síndrome de Asperger se caracteriza por la dificultad para la interacción social, las obsesiones, los patrones del habla extraños, pocas expresiones faciales y otras peculiaridades. Con frecuencia, los niños que padecen el síndrome de Asperger tienen dificultad para comprender el lenguaje corporal de otras personas. Tal vez se embarquen en rutinas obsesivas y muestren una sensibilidad inusual a los estímulos sensoriales”, señala el Johns Hopkins.
A su vez, la Confederación Asperger de España asegura que las personas con este síndrome son, generalmente, extremadamente buenos en las habilidades de memoria (hechos, figuras, fechas, épocas, etc.) muchos sobresalen en matemáticas y ciencia.
Y añade: “En términos generales encuentran dificultad en hacer amigos, no entienden las pistas sutiles necesarias para esto. Utilizan lenguaje en una manera levemente rara y toman a menudo significados literales de lo que leen u oyen. Son más felices con rutinas y un ambiente estructurado; cuando encuentran dificultad en decidir qué hacer caen en sus actividades preferidas. Aman la alabanza, ganar y ser primeros, pero el fracaso, la imperfección y la crítica les resulta difícil de sobrellevar”.
De acuerdo con información de aane.org (Asperger/Autism Network), organización que ayuda a personas con asperger, que están ubicadas en el espectro autista, quienes tienen el síndrome de Asperger tienen estas otras características: sus conversaciones pueden ser unilaterales, demasiado centradas en un tema de interés limitado, caracterizado por un lenguaje pedante y monótono. No podría percibir los indicadores sociales o el lenguaje corporal de otras personas y podría no notar los sentimientos de otros a su alrededor. “Como resultado, una persona con el síndrome de Asperger es probablemente considerada extraña o excéntrica, lo que conduce hacia un aislamiento social”.
Además, incluye otras características ―según aane.org― como habilidad motriz reducida, sensibilidad sensorial, la incapacidad de lidiar con ciertas sensaciones físicas (como sonidos, olores o texturas particulares), dependencia a la monotonía, incapacidad de hacer frente a cambios, dificultad para realizar planes y establecer prioridades, obsesión con temas de interés específicos y limitados.
“Debido a los impedimentos comunes en este trastorno, los individuos con síndrome de Asperger probablemente tengan poco éxito al tratar de mantener relaciones sociales y una considerable dificultad en varias situaciones laborales. Esto no significa que todas las personas con el síndrome son incapaces de llevar una vida productiva; de hecho, se cree que las personas con síndrome de Asperger suelen tener un cociente intelectual (IQ, por su sigla en inglés) en una escala de nivel normal a superior (genio)”, dice la organización en su página.