Luego de varias semanas y largas horas de discusión finalmente logró ser aprobada la polémica reforma a la salud presentada por el gobierno de Gustavo Petro.
Una de las sorpresas de la votación fue que, a pesar de las feroces críticas que ha lanzado el expresidente César Gaviria a esta iniciativa, los cuatro congresistas del Partido Liberal de la Comisión Séptima de la Cámara votaron a favor del proyecto.
Sin el voto afirmativo de estos representantes, la reforma no habría pasado. ¿Qué pasó?
La realidad es que aunque se hicieron varias modificaciones durante el trámite, varios de los temas propuestos desde un inicio por la exministra de Salud Carolina Corcho, y a los cuales se opone Gaviria, lograron salir adelante.
Por ejemplo, se aprobó la creación de los fondos, que tendrá a su cargo la Adres, y que para muchos congresistas será una contratación abierta que podría generar mayor burocracia y hechos de corrupción.
Además, alertan que podría haber un agotamiento de recursos y que el país repita el modelo del Seguro Social.
Finalmente, se aprobó que las EPS van a ser gestoras de salud y vida. Para algunos esto es ir acabando poco a poco con las prestadoras de salud como se conocen actualmente y varias de sus funciones pasarán a ser del Estado.
Fueron aprobados los centros de atención primaria, que es el foco de este proyecto. Aunque se menciona que podrán ser mixtos, públicos o privados, los congresistas de oposición consideran que serán mayoritariamente públicos y eso les genera varias alertas.
Hay preocupación porque se pongan en riesgo a pacientes con enfermedades huérfanas. “Son personas que hoy tienen en general unos buenos tratamientos y esto se está poniendo en riesgo”, aseguró el representante Andrés Forero, del Centro Democrático, uno de los que más criticó el proyecto y su trámite.
Según conoció esta revista, el camino para los liberales petristas que querían votar a favor el proyecto se despejó el pasado jueves, durante una reunión de bancada que sostuvieron los representantes con el expresidente Gaviria.
En el encuentro, los representantes le expresaron su respaldo en pleno al expresidente César Gaviria para que continúe como director de la colectividad, lo que despeja los rumores que se habían generado frente a un posible cambio en la jefatura del partido, pero lograron que, por ahora, se les deje en libertad para votar los proyectos del Gobierno hasta tanto no se haga una reunión de las bancadas de Senado y Cámara para tomar una decisión vinculante.
De esta manera, los cuatro representantes de la colectividad con asiento en la Comisión Séptima le dieron su voto positivo a la iniciativa.
La votación definitiva fue de 14 votos por el sí y 6 por el no.
El número mínimo de votos era de 12, es decir, el apoyo de los liberales terminó inclinando la balanza para que la iniciativa pudiera avanzar.
Ahora, el proyecto pasará al segundo debate en la Cámara de Representantes.
Aunque los tiempos no le juegan al favor a la iniciativa, podrá ser aprobada en esa corporación y el otro semestre continuar su trámite en el Senado. En ese camino podría sufrir varias modificaciones.
Las críticas de Vargas Lleras
El exvicepresidente Germán Vargas Lleras hizo su propio análisis de la aprobación de la reforma a la salud del gobierno en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes en la noche de este martes, 23 de mayo.
En su habitual opinión en 6AM Hoy por Hoy de Caracol Radio, el líder de Cambio Radical dijo que las líneas rojas, verdes, azules que los partidos políticos le hacían al articulado del proyecto que impulsó la exministra Carolina Corcho, “se fueron destiñendo”.
Enfatizó en que las líneas rojas del Partido Liberal o, al menos, las que había definido su director, César Gaviria, no se respetaron. “Sus cuatro parlamentarios de la Comisión Séptima terminaron aprobando finalmente el texto. Ninguna línea roja se respetó. Lo mismo ocurrió con el Partido de La U”.
Vargas Lleras hizo un balance de lo que, considera, es lo más lesivo de lo aprobado por la Comisión Primera.
“Lo peor, que se acaba el modelo de aseguramiento, se eliminan las EPS, básicamente acabaron con las aseguradoras, las primas, las reservas técnicas, la gestión del riesgo pasa a unas estructuras burocráticas o unos fondos cuotas regionales”.
Destacó que el Adres, como están las cosas, será un monstruo con sus mil tentáculos: “ahora controlará, auditará y será el único pagador del sistema en el país. Se acaba el aseguramiento individual, es decir, usted no podrá seleccionar la entidad que le cubra su sistema de salud. Tendremos que ir todos a empadronarse a un centro de atención primaria. Me parece que es la captura personal y política de las personas”, dijo.