Este miércoles 16 de octubre, la Cámara de Representantes retornará a sesiones ordinarias después de un descanso de seis días.
SEMANA conoció que el plato fuerte de la plenaria será la aprobación de la reforma laboral del gobierno del presidente Gustavo Petro, un texto que, pese a generar controversia en el sector empresarial y privado del país, avanza a pasos agigantados en segundo debate.
En las cuentas de los asesores del ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien se ha echado encima la iniciativa, está que la reforma laboral quede aprobada por la plenaria este miércoles 16 de octubre, si nada extraordinario ocurre. Sin embargo, si el debate se extiende, el plazo del Gobierno Petro es que esté lista entre el jueves 17 o viernes 18.
Al fin y al cabo, el presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, anunció que está dispuesto a convocar a sesiones toda la semana para avanzar en el estudio de esta y otras iniciativas.
SEMANA conoció que faltan 13 artículos por aprobar de la reforma laboral, incluso, los más polémicos del proyecto que redactó la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez. Entre ellos, aparece el artículo 22, que formaliza el contrato de aprendizaje; el 23, que habla de la monetización de la cuota de aprendizaje; el 31, que se refiere al contrato agropecuario; y el 32, que regula el jornal agropecuario.
Otros artículos pendientes son el 33, que se refiere a las garantías para la vivienda del trabajador y la trabajadora rural; el 49, que fija las licencias de paternidad; el artículo 50, que establece la licencia de maternidad y paternidad en parejas adoptantes del mismo sexo; y el artículo 52, que fija programas de convenios laborales para las víctimas del conflicto armado.
En el listado de artículos que falta por aprobar también está el que establece la proyección laboral ante la automatización de las actividades, el de protección laboral frente a procesos de descarbonización y transición energética, la prohibición de contratos sindicales para la prestación de servicios o ejecución de obras, la vigencia de la ley y las derogatorias.
La reforma laboral promete convertirse en el primer proyecto que empujó en el Congreso el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien después de esta iniciativa promete impulsar la reforma a la salud, que llegará por tercera vez al Legislativo.
En el caso de la laboral, Cristo ha transitado el terreno más fácil para el Gobierno: la Cámara de Representantes. En la Comisión Séptima, por ejemplo, hay mayorías a favor de Petro. Por allí pasó la fallida reforma a la salud y esta nueva iniciativa.
No obstante, el verdadero pulso será en la Comisión Séptima del Senado, que hundió la reforma a la salud de Petro, y en la plenaria, donde las mayorías han demostrado que tienen más independencia a la Casa de Nariño.
El representante por el Centro Democrático Andrés Forero se adelantó y le dijo recientemente a SEMANA que “es una mala noticia que la Cámara de Representantes, muy probablemente, apruebe en segundo debate la reforma laboral”.
Según afirmó, se trata de una reforma que sería regresiva para el país. “Puede terminar destruyendo hasta 450.000 empleos formales”, denunció.
El congresista del Centro Democrático recordó que la propia ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, ha reconocido que la reforma laboral no está pensada para generar nuevos empleos o incentivar la formalización.
“Nos parece que es una reforma inconveniente e inoportuna. En este momento, cuando todas las voces del país plantean la posibilidad de un proceso de reactivación económica, esta reforma lo que hace es entorpecer la posibilidad de recuperación, sobre todo, de las pequeñas y medianas empresas”, afirmó el congresista del uribismo.
Lo cierto es que esta semana, la Cámara le dará una nueva victoria al Gobierno Petro y el balón caerá a las manos del Senado, que tendrá en sus manos la decisión de ajustar el proyecto, aprobarlo como está o hundirlo.