El tramo final de la carrera por la Alcaldía de Buenaventura anticipa unos resultados reñidos el próximo domingo, 29 de octubre, entre Ligia del Carmen Córdoba y Jaime Marinez, ambos exconcejales del puerto.
En el caso de Ligia Córdoba, recibió el apoyo del partido de la U, misma colectividad que avaló la candidatura del exalcalde Eliecer Arboleda, quien es investigado por presuntas irregularidades en dos millonarios contratos: uno por $4.700 millones destinados al Festival Folclórico del Litoral Pacífico y el reinado Señorita Litoral, y el otro por un presunto desfalco de aproximadamente cinco mil millones de pesos en el hospital distrital Luis Ablanque de la Plata.
Por esta última investigación, fue detenido en el año 2018 y posteriormente enviado a la cárcel junto a su hijo, quedando encargado de la Alcaldía Edinson Bioscar, quien también fue imputado por la Fiscalía por los presuntos delitos de contrato sin el cumplimento de los requisitos legales y peculado por apropiación por supuestamente haber participado en un entramado de corrupción que les permitió a particulares quedarse con dineros de un proyecto de vivienda.
En el periodo de Arboleda Torres (2015-2019), Ligia Córdoba se desempeñaba como concejal y apoyó varias de las iniciativas de la Administración distrital. Su sucesor en el Concejo es Alexander Delgado, quien fuera el director del cuestionado Festival Folclórico, que hoy está en la lupa de la Procuraduría.
Ligia Córdoba desde hace 22 años está ligada a escenarios de poder y de toma de decisión en Buenaventura. Según la página web ligiadelcarmencordoba.com, la hoy candidata asumió en 2001 la coordinación de Recreación Municipal; entre 2004 y 2009 fue directora de Cultura en 2005.
Entre 2008 y 2010, Ligia del Carmen Córdoba fue directora Técnica de Cultura, y entre 2011 y 2019, se desempeñó como concejal de Buenaventura. En las pasadas elecciones también aspiró a la alcaldía, pero apenas obtuvo 22.059 votos.
SEMANA trató de comunicarse con la candidata para conocer su visión frente a este cierre de campaña, pero fue imposible obtener su respuesta, pese a que la pregunta fue socializada por su WhatsApp personal.
Por su parte, el candidato Marinez señaló que “Hay dos opciones, dos caminos, y Buenaventura está ante ese desafío histórico: o regresamos al pasado de los malos manejos económicos y el desgreño administrativo, de la corrupción, de pésimas administraciones, incluso de gente que terminó en la cárcel; o de un camino que nosotros representamos de un liderazgo renovador, más gerencial que puede gestionar recursos con el Gobierno nacional”.
Marinez fue coordinador de la Casa de Justicia en 2004 y luego secretario de Gobierno. En 2013 asumió como gerente territorial de Findeter y estuvo como alcalde encargado de Buenaventura en cinco oportunidades.
En las pasadas elecciones ocupó el segundo lugar con 25.771 votos. Su trasegar político ha estado enmarcado por su estrecha relación con movimientos sociales. Marinez está coavalado por la Alianza Social Independiente (ASI), Fuerza de la Paz y A.D.A.
Aunque en esta oportunidad se presentaron 16 candidaturas, ya con las cartas jugadas, solo dos tienen las mayores opciones según sondeos. Así las cosas, Buenaventura se debate entre dos modelos de gobierno. A la rencilla política, se suma la alerta por presuntas presiones de grupos Al margen de la ley que podrían incidir en la jornada electoral del próximo domingo.