No para la polémica por los congresistas de los partidos tradicionales que firmaron la nueva ponencia de la reforma a la salud que presentó el Gobierno al Congreso el pasado viernes a las 5:20 p. m. y que contó con la firma de miembros del Partido Conservador y de La U.
Uno de los congresistas que está en el ojo del huracán es el representante por Vaupés Camilo Esteban Ávila, del Partido de la U, sobre quien se siguen conociendo detalles.
Por ejemplo, se encontró que la Controlaría le abrió un proceso disciplinario el 17 de febrero de 2020 por una supuesta responsabilidad fiscal en ese departamento, por un contrato entre la EPS Mallamas Indígena y la aerolínea de pasajeros y carga Aerovías Regionales del Oriente S.A.S. (Aro), de la cual el congresista era en ese momento el representante legal.
La cuantía del daño, según el ente de control, ascendía a casi 5.000 millones de pesos. El lío se habría dado por supuestos vuelos ‘fantasma’ de pacientes que no fueron trasladados.
SEMANA conoció el documento de la Controlaría en el que se detallan las pruebas que encontró en ese momento el ente disciplinario para investigar esa responsabilidad.
“Como resultado del hallazgo fiscal se pudo establecer que la EPS indígena Mallamas pagó los vuelos cobrados por la empresa aérea Aerovías Regionales del Oriente S.A.S. en las facturas, habiendo advertido el grupo auditor de la CGR el incumplimiento en la realización de algunos vuelos, que fueron reconocidos sin objeción por la EPS”, dice el documento.
El contrato fue por 250 millones de pesos.
Por otro lado, la Unidad Investigativa de El Tiempo aseguró que esta aerolínea de Ávila, a pesar de que ya no sería representada legalmente por el congresista, ha seguido renovando contratos con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) en la regional Vaupés. Dicen que se trataría de una docena de contratos que ascienden a los 800 millones de pesos.
Ahí no pararía la polémica.
Según publicó en sus redes sociales el propio congresista y la ministra Carolina Corcho, el pasado jueves 30 de marzo, el representante estuvo acompañando a la funcionaria en un evento en Arauca, en el que se defendió la reforma a la salud en medio de la tormenta.
De hecho, en ese evento fue que la ministra arremetió contra los medios de comunicación, luego de que los directores de los partidos tradicionales afines al Gobierno le dieran la espalda.
“Hay un ambiente en este momento en el país de dirimir esta discusión en los medios. A mí me parece preocupante y peligroso que Colombia esté sometida a un estado de opinión donde mediáticamente se decide si un proyecto de ley se presenta, se tramita o no, cuando eso es una función constitucional de la República”, afirmó Corcho desde Arauca mientras Ávila escuchaba.
Lo que más llama la atención es que un día antes, la directora de La U, Dilian Francisca Toro, había anunciado que no apoyaría la reforma. Sin embargo, al día siguiente, el congresista no solo estuvo en el evento con la ministra, sino que se alineó con el Gobierno.
“Nuestra prioridad es trabajar por mejorar la salud de millones de colombianos. Por eso continuamos escuchando a la gente en los territorios para construir la mejor reforma posible. Hoy desde el departamento de Arauca. En La U escuchamos para actuar”, afirmó el congresista junto a varias fotos en la misma mesa que estaba la ministra Corcho.
Por ahora, el congresista de La U no se ha referido a esta polémica ni a las razones por las que firmó la nueva ponencia. De todas formas, desde su bancada han pedido que sea investigado y Toro reconoció que el representante no le consultó esta decisión.
“La firma del congresista Camilo Ávila en la ponencia de la reforma a la salud no fue consultada conmigo como directora de La U; el representante firmó bajo su responsabilidad”, aseguró la directora del partido.
A esa polémica visita de Corcho a Arauca se le sumó que en las últimas horas el diputado del departamento Juan Quenza denunció que supuestamente la ministra Corcho habría aprovechado para buscar apoyos políticos.
Quenza afirmó, con fotos y videos, que la ministra Corcho tuvo una reunión en la casa de la exesposa del alcalde de Arauquita, Renzo Martínez, quien ahora es candidato a la Gobernación de Arauca. Además, dijo que sería apoyado para esa aspiración por el equipo del representante del departamento Germán Rozo, del Partido Liberal, quien convocó el encuentro en el departamento como reconoció el propio Ministerio de Salud.
“Durante la Sexta Audiencia Pública, realizada por la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes y convocada por el congresista Germán Rozo Anís, la ministra de Salud y Protección Social, Carolina Corcho Mejía, afirmó que Colombia no puede estar sometida por el Estado de opinión”, informó el Ministerio a través de un comunicado de prensa.
Ese día el alcalde de Arauquita, Etelivar Torres Vargas, también respaldó la reforma a la salud. “A nuestra comunidad le han venido construyendo una opinión falsa sobre esta propuesta. Como trabajadores de la salud tenemos que decir que este sistema está sustentado en una de las cuatro patas que sostiene cualquier sistema en el mundo, en procura de una atención parcial del paciente, pero lejos de tener un modelo de promoción en salud integral. ‘Promoción, prevención y rehabilitación es lo que plantea la reforma a la salud, y desde Arauca estamos 100 % comprometidos con esta propuesta’”, aseguró Torres.
En la denuncia de Quenza sobre la correría de Corcho, el diputado señaló que la ministra no asistió a una reunión con personal de la salud del departamento, sino que fueron a una casa ubicada en la carrera 21 con calle 14 desde las 4:30 p. m. hasta las 7 p. m.
Según él, la casa es propiedad de una candidata a la alcaldía, Ehiana Galeano, y que allí también estaban el representante Rozo, el candidato a la Gobernación Renzo Martínez y el alcalde Etelivar Torres.
Por ahora, el representante Camilo Esteban Ávila, que estuvo ese día en Arauca con la ministra, se encuentra en el ojo del huracán por haber firmado la ponencia y podría ser sancionado por su partido.