En medio del debate de la reforma a la salud, la congresista Catherine Juvinao hizo una delicada denuncia de cómo varios ministros del gobierno de Gustavo Petro, que se encuentran en la plenaria de la Cámara de Representantes, estarían conversando con los congresistas para supuestamente incidir sobre su posición sobre el proyecto de reforma a la salud.
“Lo de esta plenaria es de no creer: en reforma a la salud, abren la votación de artículos y cuando van perdiendo, suspenden la votación de forma arbitraria. Acto seguido entran en acción ministros y funcionarios, hablan con congresistas y mágicamente conforman mayorías minutos después”, afirmó Juvinao.
Y pidió que los congresistas sean investigados por estas actuaciones. “La Corte Suprema de Justicia y la Corte Constitucional deben tomar nota de esto”, aseguró la congresista de la Alianza Verde.
Otro de los que denunció la influencia de los ministros sobre los congresistas fue el representante Andrés Forero, del Centro Democrático, quien dijo que supuestamente el ministro de las TIC, Mauricio Lizcano, estaría convenciendo a la bancada del Partido de la U.
“Partido de la U, con la honrosa excepción de Víctor Salcedo, apoya que se siga discutiendo la improvisada reforma a la salud de Gustavo Petro. Rindió frutos que Mauricio Lizcano se sentará desde el principio de la sesión en las curules de ese partido”, afirmó Forero.
Desde el comienzo del debate, el congresista de oposición había denunciado la presencia de varios de los ministros y altos funcionarios del Gobierno en el debate. Igualmente, el representante Hugo Lozano, del Centro Democrático, reclamó por la presencia del superintendente de Salud, Ulahy Beltrán López, cuando debería estar observando las entidades del sector, que realmente son sus funciones.
“Debería estar vigilando a los distintos actores para que cumplan con su misionalidad, incluyendo a la Adres”, aseguró el congresista. Lozano también cuestionó que estuviera en el recinto el director de la Adres, Félix León Martínez, quien debería estar atendiendo la crisis en salud que se ha conocido en vez de estar haciendo lobby en el Congreso.
Por ahora el debate de la reforma avanza poco a poco. Se ha aprobado un bloque de cinco artículos que no tenían proposiciones y falta discutir algunos de los puntos más espinosos de la iniciativa del Gobierno.
En ese sentido, uno de los temas gruesos es qué pasará con las EPS, qué rol cumplirán en el nuevo modelo y cómo quedarán luego de la reforma que se plantea, en el que pasarían a ser “gestoras de salud y vida”, pero que podrían quedar con menos funciones que con las que cuentan actualmente y centralizar todos los recursos en la Adres, que es el Gobierno.
El ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, defendió la idea de cambiar ese modelo. Velasco intervino en medio del debate para reconocer que no es un “tema fácil” que los recursos de la salud sean manejados por determinado sector. Dijo que lo que quieren no es cambiar el esquema, sino que la Nación entregue un manual de criterio de la contratación, para determinar cuándo se puede hacer privada y cuándo pública.
“Bajo el esquema de solo contratación privada, los recursos que los colombianos van a poner en la salud pueden estar en riesgo. De manera que acogemos la observación y con el Ministerio de Salud prepararemos una proposición que complemente las observaciones que han hecho”, afirmó el ministro del Interior.
El debate de la reforma a la salud continúa luego de que la semana pasada el mismo Pacto Histórico solicitara aplazar el debate mientras se terminaban de ajustar detalles por el tema de las elecciones, lo que muchos consideraron un primer impacto luego del fracaso en las urnas de ese sector.