SEMANA: ¿Por qué irá a La Habana a verificar el proceso de esos diálogos que adelanta el Gobierno con el ELN?
José Jaime Uscátegui (J.J.U.): Desde hace dos semanas le envié un oficio al presidente Gustavo Petro y al alto comisionado de Paz informándoles mi intención de viajar a Cuba y hacerlo como observador de lo que está sucediendo allá con el sexto ciclo de negociación. Llevo dos semanas esperando una respuesta de Presidencia y como finalmente no me ha llegado estoy en mi derecho de viajar en calidad de turista y tratar de indagar por esas personas que fueron secuestradas en medio del cese al fuego con el ELN y frente a las cuales no hay ninguna información. Son familias enteras que están esperando dar con el paradero de sus seres queridos. Lo hago en calidad de integrante de la Comisión de Paz y de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Representantes.
SEMANA: ¿Qué recursos presentó para poder ingresar a esos diálogos?
J.J.U.: Envié la comunicación oficial y hablé con Vera Grabe, la jefe de la delegación del Gobierno colombiano y le he informado a todas las autoridades para que sepan que asisto. Lo hago en calidad de observador. Muchos me han dicho que esa figura no está contemplada, pero es que cualquier ciudadano colombiano y cualquier congresista de oposición tiene derecho a conocer de primera mano qué es lo que está sucediendo con ese cese al fuego y en qué condiciones se va a prorrogar, cuando ya está demostrado que el ELN incumplió el cese al fuego y con una situación muy grave y es el secuestro de civiles, secuestros extorsivos que se han cometido a lo largo y ancho del país.
SEMANA: ¿Qué le contestó Vera Grabe?
J.J.U.: Fue simplemente un mensaje de texto por WhatsApp donde yo le daba a conocer la carta que le había enviado el presidente y me dijo que la revisaría. Es decir que fue una comunicación más bien informal, pero tanto la Cancillería como el alto comisionado de Paz, como la jefe de la delegación, saben que voy a estar en Cuba esta semana que viene y que estoy haciendo un llamado puntual por los secuestros que se han realizado en medio del cese al fuego.
SEMANA: ¿Va a buscar al embajador de Colombia en Cuba, José Noé Ríos?
J.J.U.: Sí, tengo intenciones de reunirme con el embajador y también quiero saber si alguien de la delegación del ELN estaría dispuesto a hablar conmigo para que le expliquen al país por qué persisten en la práctica del secuestro y seguir delinquiendo, cuando este Gobierno les ha dado todas las garantías y las oportunidades para que demuestren gestos reales de paz.
SEMANA: Si logra entrar a la mesa de diálogos con el ELN, ¿qué les diría a los guerrilleros?
J.J.U.: Que en el mes de diciembre la Defensoría del Pueblo envió al alto comisionado una lista de 91 personas que en el segundo semestre del año pasado fueron secuestradas y muchas de ellas se atribuyen al ELN, entonces la pregunta que haría es por el paradero de esas personas porque sería un compromiso real de paz. El secuestro debe desaparecer en Colombia y no es justo que prácticamente una cuarta parte del total de secuestros en el país sean atribuibles al ELN, que es un grupo que está negociando la paz en el marco de la ley de ‘paz total’ de la cual también fui ponente en el Congreso.
SEMANA: ¿Qué opina de los diálogos que adelanta el Gobierno con el ELN?
J.J.U.: Al igual que el Centro Democrático, hemos sido muy críticos de la forma como se está adelantando el proceso. Sentimos que se está negociando de espaldas a las Fuerzas Armadas, de espaldas al Congreso, de espaldas a la rama judicial, de espaldas a la comunidad internacional y de espaldas a las víctimas. Esa fue mi posición durante el debate de la ley de ‘paz total’ y en un sexto ciclo, que es definitivo, porque el Gobierno tiene motivos de sobra para no prorrogar ese cese al fuego. Quiero saber de primera mano si el cese va a ser prorrogado y en qué condiciones van a hacerlo, porque ya está demostrado que el ELN incumplió el último cese y las cifras de secuestro así lo demuestran. Así que yo no voy ni a avalar ni a aplaudir ni a sabotear, porque esa no es mi intención, sino que lo hago con un enfoque humanitario de saber qué está pasando con las víctimas de secuestro en Colombia y por qué el ELN no ha cesado esa práctica.