Terminó la segunda legislatura del Congreso y a partir del 20 de julio comenzará la tercera del gobierno de Gustavo Petro. Se trató de un periodo de fuerte pulso político en el que el Gobierno logró sacar adelante algunas reformas, entre ellas la pensional, a pesar de los cuestionamientos por supuestas jugaditas en medio de ese proceso.
También fue cuestionado el fuerte lobby que hicieron funcionarios del Gobierno para que fueran aprobadas. En entrevista con SEMANA el representante a la Cámara Juan Espinal, quien fue el segundo vicepresidente de esa corporación en la legislatura que acaba de terminar, entregó detalles de cómo fue esa operación en la que los asesores del Gobierno incidieron fuertemente para que sus reformas fueran aprobadas. Además, dio detalles de la próxima mesa directiva que estará liderada por un miembro de la Alianza Verde.
SEMANA: ¿Cómo evalúa la legislatura que terminó?
JUAN ESPINAL: La legislatura fue tomada por el Gobierno nacional, quien no respetó la autonomía del Congreso de la República e incidió en gran parte de la agenda. Si bien al final de la legislatura se pudieron sacar adelante importantes proyectos de iniciativa de los parlamentarios, especialmente en la Cámara se ocupó todo el periodo pasado de la legislatura y al final estuvimos 45 días concentrados en la reforma pensional. Por ejemplo, en la Cámara, del total de proyectos radicados para la legislatura 2023-2024, se archivaron 214, culminaron el trámite 15 y continúan vivos 180 proyectos de ley. De esos, algunos son iniciativa del Gobierno nacional. No pueden decir que no lograron pasar sus reformas en el Congreso porque sí lograron aprobar la jurisdicción agraria, la reforma pensional a pupitrazo limpio en su último debate, la reforma laboral quedó viva, varios tratados internacionales como acuerdos con Venezuela para la protección de inversiones.
Al Gobierno le terminó yendo bien, solo se le archivaron dos: la reforma a la educación que creo que todo estuvo orquestado entre el Gobierno y Fecode, porque finalmente uno pudo detectar la sincronía entre el mensaje, que de manera tranquila se plantó en la Plaza de Bolívar a tratar de presionar. Finalmente el Gobierno hubiera tenido voluntad de sacar la reforma seguramente habrían presionado al Senado y a los miembros de la bancada, pero todos terminaron apoyando el discurso de Fecode y echándole la culpa a la oposición. Y en Senado se archivó la reforma a la salud hace dos meses en la Comisión Séptima.
SEMANA: Se denunció un fuerte lobby por parte de miembros del Gobierno en esta legislatura, ¿qué pudo evidenciar sobre eso?
J.E.: Históricamente el Gobierno en los debates del Legislativo hacen presencia, pero yo nunca había visto una presencia tan agresiva, incluso, asesores parados en la puerta del Salón Elíptico básicamente haciendo una muralla para que los representantes a la Cámara no se salieran y votaran. Uno ve cómo prácticamente unos asesores entran a los representantes a la Cámara para que vayan y voten.
El ministro del Interior desbordó completamente el respeto por el Congreso de la República. Es de conocimiento público que él le escribió un mensaje a la presidente de la Comisión de Ética el día que estábamos decidiendo la recusación con la pensional, fue un mensaje “respetuoso” pero eso se llama tráfico de influencias, donde le dice a la presidente de la Comisión de Ética que en manos de ella está el futuro de 2 millones y medio de viejos y viejas de nuestro país, para que resolviéramos seguramente de manera rápida las recusaciones. Veía uno al ministro de las TIC completamente plantado en la bancada del Partido de la U, haciendo monitoreo de los representantes y muchos asesores del Gobierno nacional. Incluso, he insistido, hay más asesores del mismo Gobierno que asesores de los congresistas. Es evidente que el Gobierno nacional se ha tomado el Congreso para ejercer presión directa en el momento de votar.
SEMANA: ¿Desde el Centro Democrático demandarán la reforma pensional?
J.E.: Claro que sí. La reforma pensional está viciada en el trámite. De los 95 artículos en la Cámara solamente se lograron debatir 6 artículos. La Cámara de Representantes radicó más de 600 proposiciones que quedaron en una caja de cartón y no tuvimos la posibilidad de debatir y argumentar y poner a consideración todo el articulado. Recuerde que la Sentencia 074 de 2021 que declaró inexequible la reforma tributaria del presidente Iván Duque, uno de los argumentos gruesos fue el no debate de la integridad de todo el articulado en el momento de acoger el texto de Senado. Entonces termina uno diciendo que por menos tumbaron la reforma tributaria de Duque, ahora, por más hay evidente vicio en el trámite para tumbar la reforma pensional de Petro.
Estamos hablando de que solamente habíamos aprobado 6 artículos y el resto, o sea 89 artículos, quedaron sin discusión, sin análisis, sin reconocimiento de la Cámara de Representantes, más aún, cuando nosotros teníamos propuestas interesantes para aumentar la vigencia de la reforma pensional; y algo que se había corregido y es que las personas que no logren ahorrar más de 5 años y 9 meses podrían retirar el ahorro. Como venía el texto del Senado, los colombianos que no ahorren más de ese tiempo no podrán retirar esos recursos que son propios de ellos.
SEMANA: ¿Cómo quedará conformada la nueva mesa directiva de la Cámara de Representantes?
J.E.: A la presidencia de la Cámara hay un nombre que tiene una muy buena aceptación de la plenaria y es Katherine Miranda, una mujer con experiencia, con trayectoria, que tiene voz y que genera respeto al interior de la plenaria de la Cámara de Representantes, con quien se puede dialogar en medio de las diferencias ideológicas y esta presidencia le corresponde al Partido Verde.
La semana pasada aparece el nombre de la señora Martha Alfonso del Partido Verde, entonces hay una disputa, esperemos que el partido internamente tome una decisión porque seguramente, de lo contrario, nos iríamos a un voto limpio entre las dos representantes pero yo esperaría que la presidenta de la Cámara sea la doctora Katherine Miranda.
La vicepresidencia primera le correspondería a partidos minoritarios de acuerdo a la última sentencia del Consejo de Estado que anula la elección del vicepresidente Fernando Niño del Partido Conservador y de María José Pizarro, vicepresidenta primera del Senado. La vicepresidencia segunda le corresponde a la oposición, tanto en Senado como en Cámara de acuerdo al estatuto.
SEMANA: Como oposición, ¿qué esperan de esta tercera legislatura?
J.E.: Lo primero es que por fin tengamos una presidencia de la Cámara independiente al Gobierno nacional porque la de David Racero era evidente que era alineada 100% con el presidente Petro, lo mismo ocurrió con el presidente Calle, uno de los liberales más cercanos al petrismo, eso es evidente. Necesitamos una presidencia independiente al Gobierno nacional, que abra el debate para darle trámite a las reformas que presente el Gobierno pero también que haya un equilibrio entre las garantías no solamente para la oposición sino para todas las bancadas de la Cámara de Representantes, y algo bien importante, que recuperemos el debate y el control político en la Cámara.
En la presidencia de Racero solo hubo un debate de control político, en esta de Andrés Calle tuvimos un poco más de 7 debates de control político, pero esperamos que la próxima presidencia, de manera firme, tome la decisión de citar al menos cada 8 o 15 días que tengamos un debate de control político al Gobierno nacional, que hace parte de las competencias constitucionales que tenemos como congresistas.