Luego de la polémica que se generó en torno a la salida del superintendente de Salud, Luis Carlos Leal, en medio del escándalo de posible corrupción en cuatro EPS —tres ellas intervenidas por el Gobierno nacional—, el exsenador y excandidato presidencial, Jorge Enrique Robledo, pidió la renuncia de la directora del Dapre, Laura Sarabia.

Según ha trascendido, Luis Carlos Leal se volvió incómodo en la Casa de Nariño por las decisiones que estaba tomando y las investigaciones que adelantaba, entre ellas a Audifarma, así como a Mario Andrés Urán, un lobista cercano al gobierno.

Por esas investigaciones, y por una denuncia que puso ante la Fiscalía General de la Nación, se conoció que Laura Sarabia le habría pedido la renuncia al superintendente Leal.

Luis Carlos Leal y Laura Sarabia. | Foto: SEMANA

Robledo exigió la renuncia de Sarabia, ante esta salida de Leal. A quien el gobierno no habría respaldado en sus investigaciones al escándalo de corrupción de las EPS intervenidas, las cuales habrían terminado girando recursos de la salud a paraísos fiscales.

Para el exsenador, “no se recuerda en Colombia una actuación de un Gobierno tan cínica como esta. Laura Sarabia debe renunciar inmediatamente a su cargo”.

Detalles de las investigaciones de Leal

La Superintendencia Nacional de Salud divulgó en los últimos días el informe completo con los escandalosos hallazgos de la auditoría que adelantó a cuatro EPS del país, tres de ellas en proceso de intervención por malos manejos financieros, en la que quedó en evidencia que estas entidades estarían haciendo un uso inadecuado de los recursos de la salud. Detrás de este escándalo sobresale el nombre de Mario Andrés Urán, figura cercana al Gobierno Petro.

Ante la magnitud de los hallazgos sobre estos sospechosos movimientos en el sistema de salud, el saliente superintendente, Luis Carlos Leal, radicó una denuncia ante la Fiscalía General de la Nación, el pasado 22 de octubre. Lo que llama la atención es que, solo tres días más tarde, Sarabia le solicitó la renuncia a Leal.

Luis Carlos Leal Angarita, exsuperintendente de Salud. | Foto: Superintendencia de Salud.

La investigación se centró en las cuentas de Coosalud, Servicio Occidental de Salud, Asmet Salud EPS y Emssanar EPS, “debido a la posible injerencia de un particular, identificado como Mario Andrés Urán”, antiguo asesor de Coosalud, en la administración y manejo de los recursos de esta EPS y de las otras tres que se encuentran intervenidas. Información que —según la entidad— llegó a través de una denuncia.

La denuncia en cuestión señalaba que estas EPS estaban favoreciendo a las mismas IPS, en un entramado de corrupción liderado por Urán. Se evidenció “concentración de pagos en ciertas IPS sin la debida justificación de estos dineros y en detrimento del giro de recursos a otras entidades de salud”, señaló la Supersalud.

Para Leal, Urán lideraba una red con la que se buscaba direccionar la postulación de pagos y contratos con clínicas, hospitales y acreedores. Sus dueños, supuestamente, registran movimientos financieros en lugares como Islas Caimán, por lo que se cree que fueron a parar a paraísos fiscales.

Ese sería precisamente el más grave de los hallazgos revelados por la auditoría sorpresa, en la que se inspeccionó computadores y hasta celulares institucionales. Todo apuntaría a que —presuntamente— miles de millones de dineros de la salud se habrían desviado a paraísos fiscales y a Mario Andrés Urán.