SEMANA:¿Cómo le pareció la reciente aparición en medios de Rodolfo Hernández?
ÓSCAR JAHIR HERNÁNDEZ: Está haciendo lo mejor que sabe y es comunicar. Por primera vez en la historia de sus Facebook live comenzó a mostrar una teatralidad alrededor del mensaje que comunica. Es la primera vez que se le escucha música de fondo, volvió nuevamente a su formato de hace ocho años para que la gente recuerde la imagen de antes y no la actual, que es la que aborrecen. Ese discurso me parece de la mayor hipocresía del mundo por diversos factores que son muy fáciles de rebatir.
SEMANA: ¿Por qué?
O.H.: Le echa la culpa de su pérdida a los politiqueros que no estuvieron con él acompañando a un santandereano en la campaña, pero se le olvida decir que esos mismos politiqueros fueron atacados por él durante nueve años. Es completamente ilógico que lo fueran a apoyar. Segundo, se equivoca al decir que no lo apoyaron. Luis Eduardo Díaz, del Clan Díaz, como él lo llama, hermano del actual candidato a la Gobernación, sí lo apoyó en segunda vuelta en el Partido Conservador. Tercero, él manifiesta que tuvo miedo de que lo asesinaran y se encerró dos semanas en su casa con sus hijos y su familia. Pero los organismos de seguridad nunca encontraron que Rodolfo Hernández estuviera corriendo peligro. Mucho menos, que lo fueran a matar con un cuchillo de cocina en una reunión. Si tanto temía que lo mataran, no hubiera salido como salía de su casa a la oficina, como lo hizo la última semana.
SEMANA: ¿Rodolfo Hernández se está desmarcando de Gustavo Petro?
O.H.: Totalmente. Esa es la estrategia, desmarcarse de Petro en un departamento que es de derecha, que detesta al gobierno actual. Y para poder desmarcarse, hace lo que más sabe hacer: echarle el agua sucia a los demás. Entonces, todos los demás políticos y los actuales candidatos son petristas, menos él, pero el discurso de este lunes se le cae cuando uno se da cuenta de que entregó avales de su partido en dos ciudades del área metropolitana de Bucaramanga a petristas de primera línea.
SEMANA: ¿Cuáles?
O.H.: Luis Carlos Ayala, en Floridablanca, de la corriente de Carlos Ramón González, y Luz Dana Leal, su esposa, y a la petrista Eva González, en el municipio de Piedecuesta, el municipio donde Rodolfo nació. ¿Cómo sale a atacar a los petristas cuando él está entregando los avales de su partido a quienes fueron acérrimos petristas en primera y segunda vuelta?
SEMANA: ¿Cómo está viendo la campaña a la Gobernación de Rodolfo Hernández?
O.H.: Para mí, Rodolfo Hernández no llega al final de la campaña a la Gobernación, pero hoy él es el virtual ganador por una razón muy sencilla: si solo el 20 % de las personas que votaron por él lo acompaña en esta nueva faceta política de su vida, arranca en Santander con más de 160.000 votos. Eso no lo tiene ningún otro candidato. Él está haciendo lo mejor que sabe hacer: manejar las redes sociales con un alcance que no tiene ningún otro candidato. Ahí es donde perderían las elecciones. Los candidatos están haciendo reuniones, haciendo sancochos, empanadas, yendo de pueblo en pueblo, mientras Rodolfo, en cinco minutos, con una estrategia comunicacional, desvirtuó todas las campañas en el departamento.
SEMANA: ¿Por qué cree que Rodolfo Hernández no llega al final de la contienda por la Gobernación?
O.H.: Por tres cosas fundamentales. Por su situación con la Procuraduría. Hoy ratificaron su sanción disciplinaria. Su tema con la Fiscalía también lo puede diezmar mucho ante la opinión pública en Santander, y tercero, porque sus problemas de salud podrían llegar a afectar durante los próximos meses a raíz del estrés y las quimioterapias que le están practicando en segunda vuelta. Él ya lleva cuatro quimioterapias, viene la quinta, la sexta e, indiscutiblemente, el cuerpo, como es normal, empieza a deteriorarse. Me parece una completa irresponsabilidad con los santandereanos salir a hacer una campaña cuando realmente no está pensando en el pueblo sino en su ego personal y su propia vanidad.
SEMANA: ¿No cree que Rodolfo Hernández se lanzó a la gobernación confiado en que Petro desconoce los fallos de la Procuraduría? Es decir, cree que no podrán sacarlo de su cargo si gana.
O.H.: Lo están ayudando tanto y se siente tan confiado con las palabras de Gustavo Petro, que a una periodista en Bucaramanga le dijo que él no estaba inhabilitado y que no era cierta la decisión de la Procuraduría que lo destituyó para ejercer cargos públicos en primera instancia. Él, en su fuero personal, siente que la sanción de la Procuraduría no tiene ningún sentido, no tiene ninguna validez. Hay que esperar la segunda instancia. Ahí vamos a ver el choque de trenes, si está primero el egocentrismo o las leyes y las instituciones del Estado.
SEMANA: ¿Cree que Rodolfo Hernández es el candidato de Gustavo Petro?
O.H.: Sí, totalmente.
SEMANA: ¿Por qué?
O.H.: Porque la unión que está teniendo Rodolfo Hernández con Carlos Ramón González, a la cual se le ha unido el exalcalde de Girón, John Abiud Ramírez, determina que, efectivamente, le van a apoyar la campaña a la Gobernación. Un dato: la mitad de la lista a la asamblea está conformada por amigos y exempleados de John Abiud Ramírez. El aval que le entregó Rodolfo a la Alcaldía de Girón se lo entregó al hermano de Abiud, la lista al concejo de Bucaramanga está llena de gente cercana al mismo personaje. Esto significa que Carlos Ramón González y Ramírez se han unido en torno a Rodolfo para ayudarlo en su candidatura. A Ferley Sierra, el candidato de la Alianza Verde a la Gobernación de Santander, le entregaron el cascarón, pero no el apoyo. El Gobierno nacional tampoco lo apoyará. Hay que recordar que el único candidato a la Gobernación de Santander que le ha dado un abrazo a Gustavo Petro es Rodolfo Hernández, no los demás.
SEMANA: Nicolás Petro le dijo a la directora de SEMANA, Vicky Dávila, que Rodolfo Hernández no quiso ser presidente porque sus errores fueron muy “infantiles”. Usted estuvo en esa campaña, ¿tiene razón el hijo del presidente?
O.H.: Tiene razón. Hay que recordar que fue lo que yo también le anuncié a SEMANA en una entrevista. A Rodolfo le dio miedo ganar, no quiso ganar. Nicolás Petro no está equivocado.
SEMANA: Una última pregunta: ¿cómo le pareció el aval de William Ospina a la Gobernación del Tolima por parte de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, el partido de Rodolfo Hernández?
O.H.: William Ospina es una persona de las mayores calidades humanas, pero no sabe hacer política. Me parece que el aval que le entregaron hace parte de un mecanismo de distracción, de llamar la atención, de decir que la Liga le está entregando avales a personas buenas para ocultar todos los avales que le están entregando a personas malas.