Salvatore Mancuso, exjefe paramilitar, dio a conocer una carta en la que rechaza los ataques ocurridos en la vereda Santa Isabel de Manso, en el municipio de Tierralta, Córdoba. El recientemente nombrado gestor de paz aseguró que la agresión a la población civil es “inaceptable” y propuso varios mecanismos para evitar hechos similares.

“Lamento y condeno enérgicamente los recientes actos de agresión contra la población perpetrados en Santa Isabel del Manso, en Tierralta, sur de Córdoba. La violencia contra nuestros campesinos, venga de donde provenga, es inaceptable y merece toda nuestra repulsa y solidaridad”, expresó el exjefe paramilitar en la carta.

Comunicado de Salvatore Mancuso. | Foto: SEMANA

El ahora gestor de paz también propone soluciones a la situación que se vive en las regiones. La primera es abrir vías negociadas con organizaciones que operan en los territorios para evitar incursión armada.

“Para detener cualquier forma de incursión armada en nuestros territorios, es imperativo abrir vías negociadas y privilegiar el diálogo político con las organizaciones que operan y controlan estos territorios, desentrañar las raíces del conflicto, desmantelar los factores que lo perpetúan y desmontar los órdenes sociales que implantamos”, planteó Mancuso.

En segundo lugar, el exjefe de las AUC recalcó la importancia de los sistemas de alertas tempranas e invitó a la comunidad a hacer parte de los mismos.

“En este sentido, la Defensoría del Pueblo, ONG de derechos humanos y organismos multilaterales, como la OEA y la ONU, pueden implementar conjuntamente un sistema de alertas tempranas. Es crucial subrayar que estas alertas deben ir de la mano con comités de verificación para garantizar su funcionalidad. Exhorto a las poblaciones campesinas afectadas, a ser parte activa de estos mecanismos. Sus voces y experiencia son elementos irreemplazables para alcanzar una solución justa y duradera”, escribió Mancuso en la misiva.

Salvatore Mancuso, condenado paramilitar, ahora es gestor de paz. | Foto: JEP

De acuerdo con Mancuso, la participación activa de la comunidad es un pilar fundamental “para construir y mantener la confianza en nuestras instituciones”.

“Al involucrarse directamente en procesos de control y verificación, no solo permitirá a nuestras comunidades restaurar la confianza perdida en las instituciones y constatar que están cumpliendo efectivamente con sus funciones, sino también avanzar hacia un orden social más justo y equitativo”, agregó el exparamilitar.

Aseguró que está “convencido” de que las comunidades del Paramillo tienen “la experiencia acumulada, un sentido de resistencia inquebrantable y la voluntad para iniciar diálogos con todos los actores involucrados en el conflicto”.

“Por ese motivo, les propongo constituir las mesas regionales de paz, como un esfuerzo colaborativo para la construcción de la agenda de paz total en el territorio, como parte de un gran acuerdo nacional. La paz es un compromiso colectivo. Cuenten conmigo para ese fin”, concluyó el exjefe paramilitar, firmando la misiva como gestor de paz.

Atención: son diez los militares implicados en intimidación a pobladores de Tierralta, Córdoba; ya fueron trasladados a Montería

El Ejército Nacional confirmó a SEMANA que son diez los soldados que estarían implicados en las intimidaciones que sufrieron los pobladores de Tierralta, Córdoba. Ellos fueron evacuados hacia Montería, donde enfrentarán las investigaciones por las supuestas irregularidades que habrían cometido.

Ejército confirmó intimidación a campesinos en Tierralta, Córdoba. | Foto: Captura video de redes sociales

Los uniformados están adscritos al Batallón de Infantería N. 33 “Batalla de Junín” de la Décima Primera Brigada, quienes se desplazaron hasta la vereda El Manso tras ser advertidos sobre la supuesta presencia de hombres armados con el propósito de “brindar seguridad a los habitantes del sector”.

Sin embargo, en circunstancias que están siendo investigadas, habrían cometido actos de violencia contra la población civil. La escena quedó registrada en un video que le da la vuelta al país: allí se observó a sujetos desconocidos amenazar a los habitantes con fusiles. Inicialmente se señaló a las disidencias de las Farc y luego tambaleó esa hipótesis.