El presidente de la República, Gustavo Petro, visitó a los policías que resultaron heridos luego de recibir una brutal golpiza en medio de una manifestación que se registró en el centro de Bogotá, por parte de un grupo de indígenas.
El jefe de Estado, al terminar la agenda de trabajo regional que estaba adelantando en Antioquia y después en Santander, viajó de regreso a Bogotá e inmediatamente fue al Hospital de la Policía, ubicado en el occidente de la capital del país, para conocer de primera mano el estado de salud de los uniformados.
De acuerdo con el balance de la jornada de protesta, se reveló que fueron 11 los integrantes de la Policía Metropolitana de Bogotá los que resultaron heridos y cinco civiles más con lesiones, debido a la violencia de la manifestación.
De la misma manera, reaccionó enérgicamente por los hechos que se registraron en Bogotá el miércoles de esta semana, en donde un grupo de indígenas atacaron brutalmente a varios policías en el centro de la capital, en medio de una manifestación, la cual también dejo varios daños materiales.
El mandatario colombiano se pronunció por medio de su cuenta de Twitter, en un mensaje donde condenó los actos de violencia y las agresiones de las que fueron víctimas varios integrantes de la Fuerza Pública en el centro de la capital del país.
A renglón seguido, el jefe de Estado realizó una reflexión y dijo de manera directa que la falta de diálogo tendrá como consecuencia que se agudicen los hechos violentos en la sociedad.
“La ausencia de diálogo siempre genera más violencia. Rechazo y condeno los actos vividos hoy en Bogotá. Varios miembros de la Fuerza Pública y civiles resultaron heridos. Nunca será protesta la agresión a un policía”, sentenció Gustavo Petro.
Y señaló por medio de las redes sociales: “Todo miembro de la Policía, todo funcionario público, igual que toda persona, es sujeto de derechos humanos. Es también violador de derechos humanos el que agrede en estado de indefensión a un policía”.
La manifestación
En una verdadera batalla campal se convirtió el Centro de Bogotá en la tarde de este miércoles 19 de octubre, cuando centenares de indígenas que se habían tomado de manera irregular el antiguo edificio Avianca, ubicado en el Parque Santander, se empezaron a enfrentar con uniformados del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad).
Según conoció SEMANA, hacia las 11:30 de la mañana, decenas de indígenas de la comunidad embera katío que estaban asentados en el Parque Nacional y posteriormente fueron reubicados en La Rioja, se tomaron las entradas y salidas de esta edificación.
Al interior del edificio, hacia el mediodía, había más de 200 personas retenidas en contra de su voluntad. De acuerdo con información entregada por la Policía Metropolitana de Bogotá, los indígenas empezaron a realizar actos violentos en contra de los gestores de convivencia de la Alcaldía y a ocasionar daños a la infraestructura, por lo cual el grupo de la fuerza disponible de la Policía realizó intervención en compañía del Esmad.
Precisamente, en la carrera séptima, en un video divulgado por la senadora del Centro Democrático, María Fernanda Cabal, se ve el momento exacto en el que un policía, que al parecer habría sido derribado hacia el piso, empezó a ser atacado a punta de palos por parte de los indígenas.
En otro material que registró los hechos ocurridos en el Centro de Bogotá, se ve el momento en que indígenas ingresan a la estación de TransMilenio Museo del Oro y atacan, al parecer, a una mujer auxiliar de la Policía.
Finalmente, imágenes compartidas por la concejal de la Alianza Verde, Lucía Bastidas, dan muestra de cómo los indígenas empezaron a atacar con palos a varias de las personas que transitaban por la carrera séptima.