Juan José Lafaurie, el hijo de la senadora María Fernanda Cabal, se enteró por SEMANA el jueves pasado que su padre, José Félix Lafaurie, sería el nuevo delegado del gobierno de Gustavo Petro en la negociación de paz con el ELN. “¿Cómo así? ¿Es real lo que me están diciendo?”, preguntó al otro lado del teléfono.
Sin pensarlo, tomó el celular y empezó a escribirle a su padre por WhatsApp. Después lo llamó. Quería una explicación. No entendía cómo su líder, su polo a tierra, uno de los hombres que más admira y le ha infundido las ideas de derecha, aceptaba negociar con el ELN, a quien siempre él y su madre, la senadora del Centro Democrático, han llamado ‘terroristas’.
“Le escribí preguntándole qué estaba pasando y que yo estaba en total desacuerdo con su posición. Yo siempre he sido de los que cree en la tesis de que no se debe negociar con terroristas y que esas son las tesis que se defienden en la casa”, afirmó.
Lafaurie, el padre, le dijo que el tema lo hablarían en casa, con más calma y de frente. Antes, le aclaró que él no era un político, sino el presidente de un gremio. “Ahora soy más Cabal”, le añadió José Félix, quien lo invitó a organizar sus ideas y a conversar personalmente.
Juan José pensó que el día sería este domingo, pero no ocurrió porque el líder gremial llegó a su casa en Bogotá con dolencias en una de sus rodillas y se marchó a Venezuela, a instalar la mesa de diálogo. Por esto, la conversación entre el padre y el hijo será este martes. “Será bien larga”, le dijo el joven a SEMANA. María Fernanda Cabal estará presente. Lo mismo que sus demás hermanos.
“Yo quiero una explicación, quiero entender la razón que lo llevó a aceptar. Siento que los electores de María Fernanda, como lo soy yo, merecemos una explicación”, le insistió el joven estudiante de derecho a esta revista.
Lafaurie no quiere posar de caprichoso, porque no lo es. Él está enseñado que las cosas en su casa se discuten entre todos y siente que su padre tomó una decisión en contravía de las ideas que ha defendido siempre. José Félix y María Fernanda siempre responden a las inquietudes de sus hijos.
Aclaró que sigue admirando a su padre, tiene claro que él nunca renunciaría a sus tesis y que sigue siendo de derecha. “No se me desdibujó la imagen de mi padre, fue un momento de confusión, mi padre no renunciará a sus tesis. El reto enorme no es para él, sino para el Gobierno que tendrá en la mesa de negociación a alguien muy distinto a ellos”, destacó.
Hasta ahora, el joven Lafaurie, quien consigue votos para su madre en las elecciones, no ha tenido el primer amigo que lo haya criticado por la decisión de su padre. Uno de ellos, quien también tiene ideas de derecha, le expresó que para él y para muchos colombianos es una garantía que José Félix Lafaurie esté en la mesa. Ese mensaje lo calmó, al menos hasta el diálogo que está pendiente con su familia y del cual, seguro, saldrá más tranquilo.