La plenaria de la Cámara de Representantes avanza este martes - 7 de mayo- en la discusión del cuarto y último debate del proyecto de ley que prohíbe las corridas de toros en el país.
Antes de iniciar la discusión y aprobación del articulado del proyecto de ley, la Secretaría General puso a consideración de los representantes dos proposiciones que buscaban el archivo de la iniciativa, pero fueron negadas por la corporación, por lo que la Cámara continuará con el estudio del proyecto.
Las proposiciones para archivar el proyecto fueron negadas con 82 votos por el No y 71 votos por el sí.
Luego de negar el archivo del proyecto, se puso a consideración de los representantes las proposiciones sin aval a los artículos de la iniciativa, pero se levantó la sesión por falta de quórum y se citó para mañana miércoles 8 de mayo a la 1:00 p.m.
Esta es la tercera vez en menos de un año en la que alguno de los congresistas de la bancada animalista del Congreso intenta poner punto final a los eventos públicos de tortura con animales y esta es la única ocasión en la que un articulado de este tipo ha avanzado hasta cuarto debate en la agenda del Congreso.
Las dos primeras oportunidades para prohibir las corridas de toros se dieron con los proyectos de ley que presentaron el representante a la Cámara liberal, Juan Carlos Losada, y la senadora de la Alianza Verde, Andrea Padilla, que perseguían el mismo objetivo. Sin embargo, ambos se hundieron.
No obstante, ahora el panorama político de este articulado es diferente. El proyecto ley nació en la bancada del Pacto Histórico y llegó al Congreso como un proyecto apadrinado por el Gobierno, con la firma del exministro de Cultura encargado Jorge Zorro.
El actual texto que se discute en el Congreso es de autoría de la senadora Esmeralda Hernández y busca acabar las corridas de toros planeando un plan de reconversión laboral para las familias que demuestren que su sustento depende de esas prácticas. Es decir, no afecta otras prácticas con animales como las corralejas o las peleas de gallos.
“No se va a prohibir de un día para otro, tendremos un proceso de transición para identificar a los trabajadores taurinos y elaborar un proceso de reconversión con su participación. Si uno revisa hoy las plazas de toros, la mayoría está abandonada porque la gente no quiso volver a corridas de toros. No las siguieron haciendo, se perdió la tradición y, por tanto, no las pueden retomar”, dijo la senadora Hernández recientemente en una conversación con SEMANA.
Si la prohibición de las corridas de toros es aprobada en Colombia, las plazas de toros serán transformadas para que funcionen como centros de eventos (conciertos, actividades deportivas, lúdicas, ferias).
La comunidad taurina ha manifestado sus reparos sobre el proyecto de ley de la bancada animalista del Legislativo, que ha llamado la atención sobre que Colombia es uno de los escasos ocho países del mundo en los que aún se permite realizar ese tipo de eventos.
El representante Losada ha apuntado que “este es el momento de acabar las corridas de toros. Le hago un llamado a todos los animalistas de Colombia, no importa en qué esquina ideológica estén, tenemos que unirnos porque el lobby taurino va a venir a tratar de hundir este proyecto porque saben que se les acerca el final y van a intentar dar todas las patadas de ahogados que puedan”.