Camilo Gómez, ex alto comisionado para la Paz en el gobierno de Andrés Pastrana, criticó fuertemente la decisión de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de acoger al exparamilitar Salvatore Mancuso. Su preocupación radica en que no se puede aceptar miembros de las autodefensas en el órgano transicional, por lo que se le estaría haciendo pasar por militar.
“La JEP no tiene competencia para incorporar en su jurisdicción a los miembros de los paramilitares, en este caso a Mancuso. Pero para poder llevarlo, no sé a cambio de qué beneficios ni a cambio de qué alternativas, lo convierten entonces en miembro funcional y material de la Fuerza Pública, lo cual es a todas luces un despropósito, sobre todo frente a todos los militares y policías que actuaron bien y que cumplieron sus funciones defendiéndolo de la guerrilla y que lo hicieron dentro del marco de la Constitución y la ley”, manifestó Gómez, en conversación con SEMANA.
Este tipo de advertencias preocupan al senador estadounidense Marco Rubio, del Partido Republicano. Está de acuerdo con que se le está dando un tratamiento que no le corresponde por haber sido “un reconocido narcotraficante y violador de derechos humanos”.
“Sumamente preocupado de ver cómo la JEP en Colombia trata de hacer pasar a Salvatore Mancuso, un reconocido narcotraficante y violador de derechos humanos, como si fuera un militar”, escribió Rubio en su cuenta oficial de X.
Además, aseguró que sigue esperando la respuesta del Departamento de Justicia de Estados Unidos a una solicitud que hizo al respecto.
“Sigo esperando la respuesta del fiscal general Garland sobre mi solicitud para que el Departamento de Justicia rechace cualquier solicitud de extradición de este asesino”, concluyó el senador republicano en sus redes sociales.
Frente a la polémica por la posible catalogación de Salvatore Mancuso como “militar” ante la JEP, el presidente Gustavo Petro opinó en su cuenta de X sobre la fragmentación de tribunales para distintos actores del conflicto armado.
“Esta discusión es fundamental. ¿Se puede fragmentar la verdad en diversos tribunales? ¿Una sola persona debe confesar de acuerdo a sus diferentes condiciones ante la JEP, ante los tribunales de justicia y paz, y ante la justicia ordinaria? Al fragmentar la verdad, ¿no se obstaculiza el derecho de las víctimas a la verdad y se oscurece la misma verdad en el país? El acuerdo paz radicado en la comisión de seguridad de las Naciones Unidas ordena una confesión de la verdad integral ante la JEP para todos los actores del conflicto. Este principio de integralidad de la verdad del conflicto hay que re establecerlo”, manifestó el presidente en la red social, reaccionando directamente a las declaraciones del excomisionado Camilo Gómez.
Gómez, entre otras cosas, criticó la paz total del presidente, asegurando que se trata de una discusión de “intereses” de los grupos armados.
“La paz total no es una discusión sobre la paz o la guerra, es una discusión sobre los intereses de los narcos y de quienes están vinculados al narcotráfico, como las estructuras de Iván Mordisco y el mismo ELN. Ahí no hay una discusión de paz, hay una discusión de intereses. Esta decisión lo que busca es dejar definitivamente un parámetro inconstitucional de una negociación de paz. No me parece que la JEP haya sido creada para eso o que se pueda meter en eso. Es totalmente ajeno a sus funciones. Y, frente a la paz total, pues es que es abrirles la puerta a los narcotraficantes, que es lo que está propiciando finalmente esta política de paz”, dijo Gómez, en diálogo con este medio de comunicación.