Juan Pablo Gallo, senador del Partido Liberal, renunció a la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público por los señalamientos en su contra en torno al escándalo de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
El parlamentario fue mencionado dentro de los involucrados en el entramado de corrupción, en el que tuvo mucha relevancia la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público.
Esta célula legislativa aprueba solicitudes de crédito externo por parte de la Nación, por lo cual se sospecha el direccionamiento de recursos de estos orígenes para supuestos fines corruptos.
Por las dudas en torno a su actuación en la comisión, Gallo decidió renunciar a su puesto en ella.
“En los últimos días se ha tejido un manto de sombra frente a mi actuación como miembro de la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público, designación realizada el pasado 28 de noviembre de 2023, por esta honorable comisión”, expresó en la primera parte de la carta de renuncia, dirigida a Rafael Oyola Ordosgoitia, secretario general.
Además, aseguró que los señalamientos en su contra no tienen “fundamento” y que tiene la certeza de sus actuaciones.
“Ante señalamientos sin fundamento y con plena certeza de mis actuaciones, pero sobre todo de mi papel de opositor, de manera atenta, me permito presentar renuncia a partir de la fecha, a la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público”, concluye en la carta de renuncia.
Julián Peinado, representante a la Cámara del Partido Liberal que también resultó mencionado dentro del escándalo de la UNGRD, renunció a ser coordinador ponente del proyecto de ley de Presupuesto General de la Nación para 2025.
“No voy a ser coordinador ponente del Presupuesto General de la Nación. No me voy a prestar para aprobarle al Gobierno del presidente Petro esas inversiones forzosas que se han mencionado en todas partes. No creo que la maquinaria burocrática se debe expandir”, dijo en un video.
En cambio, dijo que debería enfocarse en “inversión pública e inversión en infraestructura”.
“No estaría bien que, en mi condición independiente y crítica frente al Gobierno, se apoye un presupuesto que no va acorde con la convicción de lo que creo que es necesario para el país. Es realmente generar una reactivación económica, de la mano de la infraestructura, y de los alcaldes y gobernadores”, planteó.
El Presupuesto General de la Nación para 2025, planteado por el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, no está totalmente financiado, por lo que el Gobierno esta buscando alternativas para solventar ese déficit.
El Gobierno propondrá una reforma tributaria, con el fin de completar el recaudo necesario, y se comienza a hablar de inversiones forzosas, con el fin de que se sustraiga una parte del ahorro de los colombianos, acumulado en los bancos, para llevar crédito barato a sectores productivos en apuros.
Sin embargo, es probable que las comisiones económicas del Congreso de la República devuelvan el presupuesto, con el fin de evitar dificultades fiscales para el país.
“Al ministro Ricardo Bonilla hay que pedirle que haga mejor las cuentas. Esta semana es clave: hasta el viernes 15 de agosto, las comisiones económicas del Congreso pueden devolver el presupuesto. Deben hacerlo porque las cuentas no cuadran. Para financiarlo, el Gobierno tendría que endeudarse en 100 billones más, aprobar una nueva reforma tributaria por 12 billones y conseguir ingresos extraordinarios por 29 billones adicionales. Nos van a llevar a una crisis fiscal”, manifestó David Luna, senador de Cambio Radical, en X.