A pesar de los constantes ataques criminales del ELN contra la comunidad y la fuerza pública, el Gobierno nacional sigue abogando por darle la mano al grupo guerrillero.
Por lo menos, así quedó claro con una resolución que expidió el presidente de la República, Gustavo Petro, en la que ordena a las autoridades del Gobierno nacional que son parte del Pacto Histórico a utilizar un lenguaje respetuoso y de desescalamiento del conflicto.
En el artículo 3 de ese documento, expresa el mandatario colombiano que, en medio de las negociaciones de paz que avanzan entre el Gobierno y delegados de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, se acordó entre las partes aplicar un lenguaje de respeto.
“En el marco del acuerdo de cese al fuego bilateral, nacional y temporal pactado entre el Gobierno nacional de la República de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), decretado mediante el Decreto 1117 del 5 de julio de 2023, las partes acordaron que usarán entre sí un lenguaje respetuoso”, expresa uno de los apartes de la resolución.
También indica: “En virtud de lo anterior, se ordena a las autoridades del Gobierno nacional a que en el marco del cese al fuego tengan en cuenta que las partes actuarán bajo el marco de un proceso de paz y usarán lenguajes de desescalamiento del conflicto armado”.
“De igual manera, en concordancia con lo señalado en el artículo 1 de la presente resolución, las referencias que se hagan del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en los diferentes actos administrativos expedidos por el presidente de la República se harán sobre el reconocimiento de que son una organización armada rebelde”, dice otro punto de la resolución 194.
Esta resolución generó toda una polémica que incluso llegó a instancias internacionales. El senador estadounidense Marco Rubio criticó con indignación este pedido del presidente Petro, algo que calificó como “insólito”.
“Es insólito que el presidente de Colombia abogue por un lenguaje respetuoso hacia los terroristas Marxistas del ELN. ¿Respetaron estos criminales a las víctimas que han sufrido por su culpa?”, apuntó el congresista de los Estados Unidos.
La escalada de atentados que el ELN se atribuyó
Mientras el gobierno del presidente Gustavo Petro anunciaba con bombos y platillos el cese al fuego con el ELN, esa estructura terrorista protagonizó la semana pasada una ola de terror, secuestros, asesinatos y violencia desbordada en varias regiones del país.
El Frente de Guerra Urbano Nacional (Fgun) del ELN se atribuyó los hechos registrados, en el marco de la conmemoración de su aniversario número 59. Esta guerrilla mencionó que se combinaron acciones de propaganda armada y acciones ofensivas contra las fuerzas armadas y la infraestructura.
“Realizamos 31 acciones político-militares en Medellín, Cali, Barranquilla, Bucaramanga, Barrancabermeja, Popayán y Cúcuta (...) En desarrollo de las acciones de propaganda armada en 6 ciudades de Colombia, unidades del Fgun instalaron 23 banderas, dos pendones, 2 panfletarias, realizó pintas y distribuyó el comunicado en las cabeceras urbanas, conmemorando el 59.° aniversario del ELN”, indicó un reciente comunicado de esta estructura criminal.
Cabe señalar que no es la primera vez que el ELN es noticia por su actuar criminal y despiadado. En esta ocasión, en menos de cinco días, logró diseñar y ejecutar acciones verdaderamente violentas y sin filtro. La primera atribución corresponde a los hechos ocurridos en horas de la noche del pasado 2 de julio contra la oficina de Tránsito y Transporte del municipio de Villa del Rosario, área metropolitana de Cúcuta.
“Un comando especial del Fgun del ELN ataca con explosivos la sede de tránsito municipal, dejando daños a la infraestructura. La acción responde a los reiterados abusos y malos manejos de esta entidad contra la población del municipio en completa impunidad”, dice el escrito.