El procurador delegado para la defensa de los Derechos Humanos, Javier Sarmiento, le envió una carta al alto comisionado para la paz, Otty Patiño, en la que le pidió que no haya un trato diferencial a los secuestrados en Colombia.
La misiva surgió a partir del caso del empresario Fabián Arias, quien fue secuestrado desde el pasado 2 de octubre en Ocaña, Norte de Santander, y cuya familia lleva 58 días esperando noticias de él. La información preliminar que tienen sus allegados es que Arias está en cautiverio, en manos del ELN.
Así las cosas, el joven padre de una bebé de cuatro meses y de un niño de nueve años es una de las más de 30 personas que han sido secuestradas por el ELN durante este año “sin que en estos casos el Gobierno nacional haya realizado tal despliegue”, señaló el procurador Ramírez.
Ese llamado surge del caso del secuestro de Luis Manuel Díaz, el padre del futbolista Luis Díaz, quien fue raptado por esa guerrilla y liberado en medio de todo un despliegue que se hizo posible gracias a las gestiones del gobierno de Gustavo Petro para conseguir su libertad.
Contrario a lo que sucedió con la familia Díaz, otros seres queridos de secuestrados están reclamando que el Gobierno escuche sus casos y que el alto comisionado para la Paz lo priorice dentro de la agenda de diálogos con ese grupo armado, conversaciones que ya van para el quinto ciclo sin que los elenos acepten liberar a los secuestrados.
“Este ente de control fue contactado por la familia de Fabián Arias, un joven empresario secuestrado en el municipio de Ocaña, Norte de Santander, quienes exigen de este ente de control la aplicación del principio de igualdad de tratamiento por parte del Gobierno nacional”, escribió el procurador delegado para los Derechos Humanos.
El secuestro es contrario al DIH
El procurador delegado Sarmiento enfatizó que “no es posible pretender continuar una negociación de paz con el ELN cuando este grupo sigue realizando prácticas contrarias al Derecho Internacional Humanitario en total impunidad y sin mensajes claros de rechazo.”
Por eso, el ente de control le recordó al alto comisionado que en Colombia no existe una categorización de los secuestrados: “En este orden de ideas, resulta pertinente recordar, señor comisionado, que no existen secuestrados de primera, segunda o tercera categoría”.
Así las cosas, la Procuraduría le solicitó al alto comisionado para la Paz que despliegue acciones para que el ELN entregue información sobre el estado de los secuestrados en Colombia, como Fabián Arias y otras personas que han sido raptadas por ese grupo armado.
“Este ente de control le solicita que se desplieguen las gestiones y acciones a través de los canales acordados en el marco de la mesa de negociación entre el Gobierno nacional y ELN, para que ese grupo informe a la luz pública el secuestro del señor Fabián Arias, así como de las demás personas que tenga en esa condición y las libere de manera inmediata”, sostuvo el procurador Sarmiento.
El secuestro de Fabián fue en cuestión de segundos: cuando salió de la casa de sus padres ese 2 de octubre para mover su vehículo, tres hombres armados lo interceptaron y se lo llevaron en el carro a un lugar que su familia aún desconoce.
Desde entonces sus captores no se han comunicado con ellos para pedir rescate, tampoco han tenido noticias de él, pero los testimonios de los lugareños les indican que el padre de dos hijos fue raptado por la guerrilla del ELN.
Incluso, el propio excomisionado de paz, Danilo Rueda, le confirmó al padre de Fabián, Jorge Arias, que los elenos serían los responsables de su desaparición.