El representante liberal Juan Carlos Losada radicó en Comisión Primera el informe de ponencia para el primer debate del proyecto de ley que busca eliminar las prácticas taurinas en el territorio nacional. Se trata de una oportunidad histórica para la iniciativa, que ha sido hundida en tres ocasiones distintas.
A Losada lo acompañan otros 40 congresistas, la mayoría de ellos integrantes de la bancada de Gobierno. Entre ellos, se destacan Katherine Miranda, Iván Cepeda, Inti Asprilla, Alexander López Maya, Wilson Arias, David Racero, Roy Barreras, María José Pizarro y Ariel Ávila.
De ser aprobado, el proyecto “prohíbe el desarrollo de las actividades de corridas de toros, rejoneo, novilladas, becerradas y tientas, encierros y suelta de vaquillas, festivales cómicos taurinos y de aficionados prácticos, así como los procedimientos utilizados en estos espectáculos, tanto en el ámbito público como en el privado”.
De esta forma, al ser expedida la ley, el Gobierno tendría un plazo de 6 meses para garantizar programas efectivos de “reconversión económica” para aquellas personas cuyos ingresos principales se deriven de dichas actividades.
El objetivo principal de este proyecto es el avance en el reconocimiento de los animales como “seres sintientes”, sujetos de una protección constitucional y legal especial.
Por otro lado, el argumento de quienes se oponen a este tipo de iniciativas radica en la cultura y tradición del espectáculo. Además, según señalan, se trata de un generador de empleo en varios territorios del país. El Congreso, con mayorías de centro derecha, hundió tres veces el proyecto.
La iniciativa, que busca derogar la Ley 916 de 2004, la cual regula los espectáculos, permitiéndolos según parámetros delimitados en la norma, tiene una larga historia de luchas en el Congreso de la República.
En 2015, el entonces senador Armando Benedetti propuso acabar con las corridas de toros, corralejas y peleas de gallos, incluyéndolo en el proyecto de ley para aumentar la protección de los animales. Esta adición fue negada.
En 2017, el entonces ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, lideró el proyecto de ley para prohibirlas. Todo esto, a raíz del rechazo generalizado hacia la práctica en algunas ciudades del país, en especial Bogotá. A pesar de que se intentó crear consensos, la iniciativa se archivó por falta de trámite en el Senado.
Fue ahí donde se pensó que un Congreso renovado iba a ser la fórmula para poder aprobar el proyecto. El proyecto fue radicado nuevamente en 2018, con la llegada de Losada a la Cámara de Representantes. Este también se hundió por razones similares.
En 2020, Losada hizo lo propio y volvió a proponer la prohibición. A pesar de que este proyecto llegó a tercer debate, una instancia histórica, se volvió a hundir por falta de trámite.
“Desgraciadamente nuestro proyecto de prohibición de las corridas de toros se hundió por tiempos en el Senado de la República donde no le dieron debate a esta importantísima iniciativa. Nosotros lo vamos a volver a radicar el 20 de julio, y esperamos que, en la próxima legislatura, en el próximo periodo del Congreso no se utilicen artimañas”, prometió el senador y así lo hizo.
A pesar de que aún existan voces que defiendan estas prácticas, se trata de un Congreso más progresista y con una posible aplanadora a favor del Gobierno de Gustavo Petro. Se espera que la próxima semana se debata esta iniciativa y podría haber ambiente a favor de la prohibición de las corridas de toros, una demanda de los sectores alternativos.