La Comisión Séptima del Senado le puso fin a la peligrosa reforma a la salud del gobierno de Gustavo Petro.
Este miércoles 3 de abril, después de siete horas de debates e impedimentos, los senadores sometieron a votación la ponencia de archivo de la reforma a la salud. Y tal como estaba previsto, la iniciativa terminó hundida.
Nueve de 14 senadores votaron por el archivo de la iniciativa que redactó inicialmente la exministra de Salud Carolina Corcho, y que terminó en manos de su sucesor, Guillermo Alfonso Jaramillo.
Los senadores Norma Hurtado (Partido de La U), Miguel Ángel Pinto (Liberal), Nadia Blel (Conservador), José Alfredo Marín (Conservador), Honorio Henríquez (Centro Democrático), Alirio Barrera (Centro Democrático), Lorena Ríos (Colombia Justa Libres), Berenice Bedoya (Alianza Social Independiente) y Ana Paola Agudelo (Partido Mira) fueron los encargados de sepultar la iniciativa.
“La reforma, lamentablemente, dividió al país y generó dos bandos: los buenos y los malos. Y cuando se habla de salud no debería haber este tipo de divisiones”, argumentó Norma Hurtado cuando sustentó el archivo.
Ella, quien ha seguido como pocos todos los textos que se fueron ajustando de la reforma, dijo que sus compañeros están de acuerdo con la necesidad de llevar al sistema de salud hasta las zonas más remotas, pero no de la forma como lo planteó la iniciativa promovida por el Gobierno.
“Esta reforma es regresiva en términos de derechos, coartaba la libre elección de escoger los centros de atención primaria”, explicó Hurtado.
Y añadió: “Hemos visto que en este articulado se desconocen algunos logros. ¿Por qué nos tiene que doler que existan algunas clínicas en ciertas ciudades del país? Son un complemento para garantizar la calidad de vida de los ciudadanos”.
Además, le lanzó un fuerte sablazo al Ministerio de Hacienda. “Este ministerio brilla por su ausencia en la sustentación de la reforma a la salud. Aquí no hay ni un delegado del Ministerio de Hacienda, hay un aval, un concepto que merecía ser aclarado. Hasta el momento, siendo las 12:06 del mediodía, el único pronunciamiento que ha hecho el ministro Ricardo Bonilla frente a la reforma fue cuando irrespetó al ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, y dijo a la prensa, ‘déjenlo, que está divagando’”.
Hurtado -quien recordó cómo La U y distintos sectores políticos intentaron concertar con el Gobierno la redacción y concertación de un nuevo texto- expresó que hasta el día del archivo de la reforma a la salud, el Gobierno no les dejó claro a los congresistas cuánto costaba oficialmente la reforma a la salud. “Qué difícil fue concertar con la anterior ministra (Carolina Corcho)”, recordó.
El ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, intentó convencer a los congresistas, pero no lo consiguió. Tampoco lo logró el ministro Guillermo Alfonso Jaramillo, además de los congresistas del Pacto Histórico que intentaron persuadir a sus compañeros.
Esta es la tercera derrota legislativa que Gustavo Petro enfrenta en sus más de 19 meses de gobierno.
Primero sufrió un gran golpe cuando el Congreso le hundió su reforma política.
Posteriormente, enfrentó el archivo de la reforma laboral, que fue nuevamente radicada y está en veremos porque no avanza en el Legislativo, y este miércoles, soportó la derrota de su reforma a la salud, un polémico proyecto que, además del desgaste político, les costó la cabeza a cuatro ministros, entre ellos, su autora, Carolina Corcho, además de José Antonio Ocampo, Alejandro Gaviria y Cecilia López, los últimos por oponerse a la iniciativa.