En el Congreso de la República comienzan los días definitivos para el trámite de las reformas del Gobierno de Gustavo Petro.

La atención se centra en el Senado de la República donde están en trámite la pensional y la reforma a la salud, pendientes del inicio de la discusión que tiene que darse este mismo semestre porque, si esto no sucede, se hunden.

Si bien está pendiente que el Senado termine de escuchar las intervenciones de la sociedad civil en la sesión informal sobre la reforma pensional, en este ya se agendó la discusión de la reforma pensional como el segundo punto del orden del día entre los proyectos que van para el segundo debate.

Ese articulado está identificado como el proyecto de ley número 293 de 2023 Senado “por medio de la cual se establece el sistema de protección social integral para la vejez”. En el calendario queda claro que son cuatro las ponencias entre las que tendrán que dirimir los congresistas.

La plenaria del próximo martes 2 de abril fue citada para la 3 de la tarde y, previo a que se aborde la reforma pensional deberá revisarse un articulado que busca modificar la Ley 2165 de 2021 de autoría del senador conservador Germán Blanco Álvarez.

Sin embargo, la reforma a la salud no aparece en la agenda. La Comisión Séptima del Senado sí fue citada para la mañana del martes, pero entre los cuatro proyectos que tendrá esa cámara en consideración aún no está el articulado que busca arrancar las bases del sistema de salud que ha operado en Colombia durante tres décadas.

Ese articulado aún no ha sido tenido en cuenta en la agenda de la Comisión que preside la senadora del Pacto Histórico, Martha Peralta, pese a que congresistas de oposición e independencia estuvieron pidiendo agendarlo para llevar a cabo su debate durante el mes de marzo o, incluso, para los días laborales de Semana Santa.

No se descarta la posibilidad de que la reforma a la salud se anuncie en el marco de los debates de la Comisión Séptima, durante la semana de Pascua. No obstante, ese sería apenas el banderazo inicial para el trámite porque tras la notificación de que se dará sobre ese debate seguirá el paso de votar los impedimentos y dependerá de la senadora Peralta la definición de qué día inicia en firme la discusión.

Además, la batuta en este asunto no está solo en manos de esa congresista del Pacto Histórico porque en el catálogo de pendientes del Congreso también está el trámite de las recusaciones contra integrantes de la Comisión de Ética que fueron presentados contra legisladores que se oponen a la reforma a la salud.

Mientras que para el caso del segundo debate de la reforma pensional están en trámite cuatro ponencias (la mayoritaria del Gobierno, dos de archivo y una alternativa) entre las que tiene que dirimir la plenaria del Senado; en el curso del tercer debate de la reforma a la salud se revisarán tres (la del Gobierno, una de archivo y otra más que se cataloga como alternativa).

El punto que tienen en común ambas reformas es que estas tienen que ser aprobadas antes de que finalice esta legislatura porque, si eso no sucede previo al 20 de junio, se hundirían. El Gobierno inicia un periodo de gestiones contra reloj en el Congreso de la República.