El cáncer se presenta cuando las células dañadas o anormales en el organismo, en lugar de ser eliminadas y reemplazadas por las nuevas, se reproducen “sin control y se diseminan a los tejidos que las rodean. Los cambios en el ADN (ácido desoxirribonucleico) causan el cáncer”, según el Instituto Nacional de Cáncer de los Estados Unidos.

De acuerdo con cifras dela Organización Mundial de la Salud, tan solo en 2020 se reportaron 1,41 millones de casos de cáncer de próstata. Además, este tipo de cáncer es uno de los más comunes, junto con los de mama, pulmón, colon y recto.

El cáncer de próstata es uno de los que más afecta a los hombres. | Foto: Getty Images

El Organismo internacional explica que una característica definitiva del cáncer “es la multiplicación rápida de células anormales que se extienden más allá de sus límites habituales y pueden invadir partes adyacentes del cuerpo o propagarse a otros órganos, en un proceso que se denomina ‘metástasis’. La extensión de las metástasis es la principal causa de muerte por la enfermedad”.

Factores de riesgo

En ese mismo hilo, la OMS indica los factores de riesgo, es decir, ciertas condiciones que favorecen el desarrollo de esta enfermedad, a nivel general. Entre los que se encuentran: “el consumo de tabaco y de alcohol, la alimentación poco saludable, la inactividad física y la contaminación del aire son factores de riesgo de cáncer y de otras enfermedades no transmisibles”.

Por su parte, Mayo Clinic, especifica otros factores de riesgo hablando concretamente del cáncer de próstata, entre los que destacan, por ejemplo, la edad, raza e historial clínico en la familia:

  • “Edad avanzada. El riesgo de tener cáncer de próstata aumenta con la edad. Es más frecuente después de los 50 años de edad.
  • Raza. Por razones que aún no se han determinado, los hombres afroamericanos tienen un mayor riesgo de cáncer de próstata que los de otras razas. En los afroamericanos, el cáncer de próstata también tiene más probabilidades de ser agresivo o avanzado.
  • Antecedentes familiares. Si se ha diagnosticado con cáncer de próstata a un familiar cercano, como un padre, hermano o hijo, quizás tu riesgo sea más alto. También, si tienes antecedentes familiares de genes que aumentan el riesgo para cáncer de mama (BRCA1 o BRCA2) o antecedentes familiares significativos de cáncer de mama, tu riesgo para cáncer de próstata quizás sea más alto.
  • Obesidad. Las personas obesas quizás estén a un riesgo más alto de padecer cáncer de próstata, comparadas con las que se considera están a un peso saludable, aunque los estudios han producido resultados mixtos. En las personas obesas, es más probable que el cáncer sea más agresivo o o que recurra después del tratamiento inicial”.

Dicho esto, en el caso puntual del cáncer de próstata, la Sociedad Americana del Cáncer de Estados Unidos, explica que este se “origina cuando las células de la próstata comienzan a crecer fuera de control. La próstata es una glándula que solo tienen los hombres. Esta glándula produce parte del líquido que conforma el semen”.

El cáncer de próstata ha teniendo un aumento en la sociedad colombiana desde el 2018. | Foto: Getty Images

Tipos de cáncer de próstata

Así mismo, indican que son varios tipos en los que esta enfermedad se puede presentar. Casi todos “son adenocarcinomas. Estos cánceres se desarrollan a partir de las células glandulares (las células que producen el líquido prostático que se agrega al semen)”. Pero también pueden ser:

El cáncer de próstata se genera por un crecimiento descontrolado de las células. | Foto: Getty Images
  • Carcinomas de células pequeñas
  • Tumores neuroendocrinos (aparte de los carcinomas de células pequeñas)
  • Carcinomas de células transicionales
  • Sarcomas

Síntomas

Desde los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades indican que no en todos los pacientes esta enfermedad se manifiesta de la misma manera, pero es importante consultar al médico de inmediato en el caso de que se presenten alguno de los siguientes síntomas:

  • “Dificultad para comenzar a orinar.
  • Flujo de orina débil o interrumpido.
  • Micción con frecuencia, especialmente por la noche.
  • Dificultad para vaciar la vejiga por completo.
  • Dolor o ardor al orinar.
  • Sangre en la orina o el semen.
  • Dolor persistente en la espalda, las caderas o la pelvis.
  • Dolor al eyacular”.