El cáncer de pulmón es el más letal en todo el mundo. Suele manifestarse con un tumor que se desarrolla en el tejido encargado de transportar oxígeno al interior del cuerpo y expulsar el CO2. Cuando es detectado en etapas tempranas, tiene una tasa de supervivencia cercana al 60 por ciento.

Con 1,8 millones de defunciones al año asociadas a la enfermedad, los expertos advierten que fumar representa el principal factor de riesgo asociado con este cáncer. Sin embargo, también pueden aparecer en personas no fumadoras. La inhalación involuntaria de humo de tabaco, la exposición al gas radón, variantes genéticas hereditarias y la contaminación del aire también se relacionan con su aparición.

El cáncer de pulmón es el más letal en todo el mundo. | Foto: Getty Images

Los síntomas de cáncer de pulmón incluyen tos persistente, dolor toráxico, fatiga, flemas con sangre y dificultad para respirar. Sin embargo, estas alertas tienden a aparecer en estados avanzados, cuando el tumor ha alcanzado gran parte del órgano o ha hecho metástasis, complicando así el tratamiento. La problemática persiste en Colombia, pues el 54 por ciento de nuevos casos de cáncer de pulmón fueron detectados en su etapa más tardía.

¿Por qué es necesario un diagnóstico temprano y preciso?

Un diagnóstico temprano de cáncer de pulmón es clave para salvar vidas. La supervivencia de los pacientes con esta patología depende de la etapa en la que se diagnostica, el tipo de célula de origen y el estado físico del paciente. Si el cáncer se detecta de manera oportuna, la tasa de supervivencia a cinco años es del 60 por ciento. Pero, esta cifra disminuye al 5 por ciento cuando la enfermedad se encuentra en una etapa avanzada.

El cáncer de pulmón incluye diversos subtipos y su identificación precisa puede marcar la diferencia en el tratamiento. “Dentro del grupo de los adenocarcinomas, pueden encontrarse alteraciones genómicas específicas, como las del gen EGFR, que favorece la supervivencia de las células malignas. Hace 20 años, estos casos se trataban exclusivamente con quimioterapia”, explica Alejandro Ruíz, director médico del Centro de Investigación y Diagnóstico en Biología Molecular FICMAC.

Lo ideal, dice, es caracterizar el subtipo de tumor de cada paciente “mediante pruebas moleculares, brindando información de calidad a los oncólogos para un tratamiento más adecuado, como las terapias orales, que son más efectivas y menos tóxicas”.

En el cáncer de pulmón, las mutaciones genéticas pueden tener un impacto en el desarrollo de la enfermedad. De hecho, alrededor del 8 por ciento de los casos están relacionados con una predisposición genética. 

Radiografía de pulmón que muestra cáncer de pecho | Foto: peter dazeley

En ese sentido, acceder a pruebas de biología molecular, hace posible que la tasa de supervivencia del paciente incremente hasta en 5 años, e incluso, aunque en menor proporción, algunos pacientes tratados con inmunoterapia se consideran curados.

El director médico del Centro de Investigación y Diagnóstico en Biología Molecular subraya la importancia del diagnóstico y el tratamiento oportunos, particularmente en Colombia, donde menos del 50 por ciento de la población tiene acceso a pruebas diagnósticas especializadas.

De ahí que detectar el cáncer de pulmón a tiempo no solo salva vidas, también mejora significativamente el bienestar de miles de pacientes en todo el mundo.