Justo cuando en el mundo se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Seno, las cifras que entrega el Ministerio de Salud sobre esta enfermedad son preocupantes. Recogiendo datos de Infocáncer, se puedo establecer que 10 de cada 100 mil habitantes en el país padecen cáncer de mama. En la actualidad, se registran 2,296,840 nuevos casos en el mundo, de los cuales 17.018 corresponden a Colombia, donde la tasa de mortalidad pasó de 9.4 a 10.8 por cada 100.000 personas.

El Ministerio de Salud informó que en la país se desarrolla la estrategia ‘Detección temprana sí y bien hecha’ y se ha puesto en marcha un plan de choque, en colaboración con las 32 entidades territoriales de salud y seis distritos. Esta se enfoca en la detección temprana, dado que el cáncer de mama no es prevenible.

Una mujer asiática muestra una cinta rosa como señal del mes de octubre para concientizar sobre el cáncer de mama | Foto: Semana

“Las acciones están orientadas a facilitar un diagnóstico oportuno y garantizar un tratamiento continuo. La detección temprana y la atención integral son prioridades del Plan Nacional de Desarrollo y el Plan Decenal de Salud Pública”, señala el ministro de Salud y Protección Social, Guillermo Alfonso Jaramillo.

Según los expertos, detectarlo este cáncer de manera temprana puede aumentar las probabilidades de supervivencia hasta en un 85 por ciento.

La Organización Mundial de la Salud agrega en ese sentido que cuando el cáncer se detecta oportunamente es más probable que responda al tratamiento. Esto a su vez facilita realizar intervenciones menos invasivas, como cirugías localizadas, aumentando las posibilidades de que las mujeres puedan preservar el seno afectado.

Avances en la detección de cáncer de mama en Colombia

Entre las herramientas más efectivas para el diagnóstico temprano del cáncer de mama se encuentran la mamografía y la ecografía. Al respecto, el Instituto Nacional de Cancerología recomienda a las mujeres mayores de 40 años realizarse estos exámenes cada año. En los casos donde la mamografía no es adecuada por las características del tejido mamario, la resonancia magnética es una alternativa.

También existen test a través de los cuales se pueden identificar que existe riesgo de esta enfermedad.

Algunos tipos de cáncer de mama presentan receptores hormonales que se adhieren al estrógeno y a la progesterona, lo que favorece el crecimiento del tumor. En esta situación, se sugiere el tratamiento hormonal, que consiste en utilizar medicamentos que bloquean receptores o que reducen el nivel de estrógenos en el cuerpo y en instancias especiales, se recurre a la supresión ovárica (la extirpación o suspensión de la función de los ovarios).

Cáncer de mama | Foto: Getty Images

Rutas de atención

En Colombia, el cáncer de mama sigue siendo una de las principales causas de mortalidad entre las mujeres, por lo que los esfuerzos del sistema de salud han evolucionado considerablemente para garantizar que las pacientes con sospecha o diagnóstico de esta enfermedad reciban una atención oportuna y de calidad. A través de la implementación de las Rutas Integrales de Atención en Salud (RIAS) entre 2013 y 2018, se ha definido un camino claro para guiar a las pacientes en cada etapa del proceso, desde la promoción y prevención, hasta el diagnóstico temprano, el tratamiento, el seguimiento y los cuidados paliativos.

Estas rutas aseguran que los profesionales de la salud tomen decisiones rápidas y consistentes en casos de sospecha de cáncer de seno, lo que optimiza tanto el tiempo como los recursos disponibles. El tiempo es un factor determinante en el éxito del tratamiento de esta enfermedad, ya que un diagnóstico temprano mejora significativamente las posibilidades de supervivencia, reduce complicaciones y disminuye los costos asociados a la atención.

Un aspecto crucial que toda paciente debe conocer es la relación entre la historia familiar y el riesgo de desarrollar cáncer de mama. | Foto: Adrianna Williams 2011

Las rutas de atención actuales definen los pasos clave que deben seguirse desde la detección de una posible anomalía hasta el tratamiento, asegurando que las pruebas diagnósticas se realicen en el menor tiempo posible, idealmente dentro de las cuatro semanas posteriores a la confirmación del diagnóstico.

Un aspecto crucial que toda paciente debe conocer es la relación entre la historia familiar y el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Se estima que entre un 5% y un 10% de los casos están relacionados con mutaciones genéticas hereditarias, lo que subraya la importancia de que las mujeres conozcan su historial médico familiar. Este conocimiento permite a los médicos establecer rutas de seguimiento personalizadas, activar consultorías genéticas y ofrecer un manejo preventivo más eficaz en aquellos casos de mayor riesgo.