A comienzos de este mes, la Organización Mundial de la Salud entregó un diagnóstico preocupante. Se estima que para el año 2050, los casos de cáncer se incrementarán un 77 por ciento en todo el planeta. Esto representa más de 35 millones de casos nuevos.
En ese sentido, una de las mayores preocupaciones es que los nuevos casos están aumentando de forma acelerada en las personas menores de 50 años.
De ahí que la ciencia se encuentre en una carrera contrarreloj. Factores como el envejecimiento de la población, el tabaquismo, el alcoholismo, el cambio climático y la obesidad han facilitado el aumento de las cifras, lo que pone contra las cuerdas a los servicios de salud especialmente de los países menos desarrollados.
A los anuncios que han hecho grandes farmacéuticas en todo el mundo, este miércoles se suma el del presidente ruso Vladimir Putin, que sorprendió al mundo al asegurar durante un foro en Moscú sobre tecnologías futuras que su país está “muy cerca de la creación de las llamadas vacunas contra el cáncer y fármacos inmunomoduladores de una nueva generación”.
Y fue más allá: “Espero que pronto se utilicen eficazmente como métodos de terapia individual”. Sin embargo, el mandatario ruso --que en 2022 habría ocultado evidencia de un cáncer que padeció y del que fue operado-- no precisó para qué tipos de cáncer servirían dichas vacunas.
El anuncio se da luego de que una comisión de expertos de Lancet Oncology lanzara una alerta y advirtiera que Europa podría vivir una epidemia de cáncer en la próxima década si no se prioriza la investigación. Lo anterior se debe a que, a causa de la pandemia, no se diagnosticó un millón de casos de cáncer en Europa, lo que puede retrasar los resultados del cáncer en una década.
De acuerdo con los autores de Lancet Oncology, priorizar la investigación del cáncer es crucial para que los países europeos brinden una atención oncológica más asequible, de mayor calidad y más equitativa, con pacientes tratados en hospitales que realicen investigación, que tendrán mejores resultados que aquellos que no investiguen.
“Con el telón de fondo de la pandemia de Covid-19, el Brexit y la invasión rusa de Ucrania, es más importante que nunca que Europa desarrolle un entorno de investigación oncológica resiliente que juegue un papel transformador en la mejora de la prevención, el diagnóstico, el tratamiento y la calidad de vida para los pacientes actuales y futuros, y aquellos que sobreviven al cáncer”, expresó el profesor Mark Lawler, autor principal de la comisión.
El anuncio de Putin resuena en medio de los avances de varios equipos científicos que trabajan para hallar una vacuna contra varios tipos de cáncer. Es que el sueño de una vacuna contra el cáncer, capaz de estimular el sistema inmune para combatir los tumores, está en el horizonte de la comunidad científica.
Luego de varios años de pocos triunfos, la consolidación de otras inmunoterapias y el éxito de las plataformas de ARN mensajero (ARNm, en el desarrollo de vacunas durante la pandemia) han reavivado el optimismo de los científicos.
Moderna, una de las grandes farmacéuticas del mundo, compartió en 2022 los resultados de una serie de pruebas preliminares de su vacuna contra el cáncer de piel. De acuerdo con Stéphane Bancel, en declaraciones recogidas por la agencia AFP en 2023, esa vacuna experimental contra el melanoma estaría disponible en tan solo dos años.
Esto abrió una esperanza especialmente en Europa, donde los tumores cutáneos han crecido un 40 por ciento en los últimos cuatro años. En el mundo, la enfermedad cobra la vida de cerca de 60 mil personas.
* Resumen de agencias.