Llegó enero. Las fiestas y luces de la Navidad y el Fin de Año se apagaron y en el primer mes del año comienzan de nuevo las rutinas y actividades propias de la vida diaria.
Pero, en medio del paulatino regreso a las clases y el trabajo, es importante destinar un tiempo para evaluar cómo está la salud, en gran medida debido a los excesos que deja diciembre en los que se incrementa el consumo de licor y de recetas poco saludables y se deja de lado por un tiempo el ejercicio físico para privilegiar las actividades de esparcimiento.
Por eso, después de las fiestas de Fin de Año, de las vacaciones y de los excesos en comidas y bebidas, vale la pena hacernos un chequeo médico general para saber cómo se encuentra nuestro cuerpo.
Luis Moya Jiménez, presidente de la Liga Colombiana contra el Infarto, sostiene que la prevención es la principal herramienta para detectar enfermedades, por lo que recomienda practicar una serie de exámenes de rutina una vez al año para saber cómo se encuentra nuestro organismo y si en el transcurso del último año apareció alguna enfermedad que amerite hacer un seguimiento.
“Los exámenes más comunes, que deben ser formulados siempre por su médico son: parcial de orina, glicemia, colesterol, triglicéridos, perfil tiroideo, creatinina, Rx de tórax, electrocardiograma. Y, en el caso de las mujeres la citología y la ecografía de mama”, asegura el especialista.
Adicionalmente, las mujeres deben hacerse un chequeo ginecológico a partir de los 18 años y los hombres un examen urológico desde los 45 años.
Así que tome nota de los exámenes que debe realizar. Aquí le explicamos en que consisten cada uno:
Parcial de orina: Un análisis de orina es una prueba que se toma con la primera micción de la mañana, estando en ayunas. A menudo se realiza para chequear si hay una infección de las vías urinarias, problemas renales o diabetes.
Examen de glicemia: Un examen de azúcar en sangre mide la cantidad de un azúcar llamado glucosa en una muestra de sangre para averiguar si los niveles están dentro de límites saludables. A menudo se usa para diagnosticar o vigilar la diabetes.
Examen de colesterol: Una prueba de colesterol es un análisis sanguíneo que mide la cantidad colesterol y de ciertos lípidos en la sangre. El colesterol es una sustancia cerosa parecida a la grasa que se encuentra en la sangre y en todas las células del cuerpo. El nivel total de colesterol en sangre no debe superar 200 mg/dL.
Examen de triglicéridos: La prueba de triglicéridos mide la cantidad de una grasa que hay en la sangre llamada triglicérido. Los niveles altos de triglicéridos pueden aumentar el riesgo de un ataque al corazón o un accidente cerebrovascular (infarto cerebral). Hay tres mediciones que permiten saber si los triglicéridos están altos.
- Normal: menos de 150 miligramos por decilitro (mg/dl), o menos de 1.7 milimoles por litro (mmol/l)
- Límite: 150 a 199 mg/dl (1,8 a 2,2 mmol/l)
- Alto: 200 a 499 mg/dl (2,3 a 5,6 mmol/L)
Perfil tiroideo: Los exámenes de la tiroides incluyen análisis de sangre y pruebas de imagen. Los análisis de sangre para la tiroides incluyen a su vez: Hormona estimulante de la tiroides (TSH): Es la medida más precisa de la actividad de la tiroides. T3 y T4: Miden diferentes hormonas de la tiroides.
Examen de creatinina: La prueba de creatinina se usa para averiguar si los riñones están funcionando bien. A menudo, se solicita junto con otra prueba de riñón llamada prueba de nitrógeno ureico en sangre (NUS) o como parte de un panel metabólico completo.
Examen Rx de tórax: Los rayos X, o radiografía del tórax se utiliza para evaluar los pulmones, el corazón y la pared del pecho, y se puede utilizar para diagnosticar la falta de aliento, una tos persistente, fiebre, dolor de pecho o lesiones. También es usado para ayudar a diagnosticar y monitorear el tratamiento de una variedad de condiciones de los pulmones tales como la neumonía, el enfisema y el cáncer. Debido a que los rayos X del tórax son rápidos y fáciles, resultan particularmente útiles para diagnósticos y tratamientos de emergencia.
Electrocardiograma: Un electrocardiograma muestra si su corazón está latiendo a un ritmo y con una fuerza normal. También deja ver el tamaño y la posición de las cámaras del corazón. Un electrocardiograma anormal puede ser un signo de daño o enfermedad del corazón.
Una vez se tengan los resultados de los exámenes, hay que acudir al médico para revisarlos.
Es muy importante realizarse los chequeos médicos para detectar cualquier anormalidad en el organismo y poder tomar las medidas a tiempo.
El profesional de la salud le dará las recomendaciones para llevar un estilo de vida saludable cómo llevar una dieta sana, realizar ejercicio y tomar medicamento si lo ve necesario.