Los alimentos azucarados contienen hidratos de carbono simples y cuando se consumen en cantidades abundantes, hacen que el organismo trabaje excesivamente y se acumulen en el cuerpo en forma de grasa.
Por lo general, este tipo de alimentos hacen parte de los productos procesados industrializados, como las golosinas, las bebidas gaseosas azucaradas, la miel de caña, los dulces y mermeladas, helados, tortas, masitas, jugos en sobre, entre otros. Y cuando estos se consumen en exceso, suelen surgir ciertos problemas de salud tales como enfermedades del corazón, diabetes, caries dentales y obesidad.
Adicional a ello, una dieta en la que se consuma una cantidad excesiva de azúcar tiene efectos sobre la función cognitiva del cerebro. Según La Vanguardia, este alimento provoca un aumento de los niveles de la glucosa en la sangre, lo que a su vez influye en el hipocampo. Como tal, las consecuencias son una menor capacidad de concentración y de atención, así como de memoria.
Por su parte, la Confederación Española del Alzheimer, detalla que el consumo de azúcar podría estar relacionado con padecer enfermedades mentales y con el Alzheimer. Por ello, aconsejan una dieta y un estilo de vida saludable, con lo que se podría evitar sufrir estas enfermedades.
Así las cosas, la porción recomendada al día, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) es no exceder el 10 % de las calorías totales, lo que quiere decir que un adulto que necesita 2000 calorías al día debería consumir al menos 25 gramos de azúcar. Sin embargo, para muchos dejar a un lado el consumo de este ingrediente es todo un reto, pues funciona como una adicción para el organismo, por lo que son necesarias ciertas estrategias para dejarlo a un lado.
El portal web El Diariony da a conocer cuatro métodos que dejar a un lado el consumo de este tipo de alimentos en un corto tiempo:
Eliminar las bebidas azucaradas
El médico especialista Borja Bandera señala para el portal en mención que una lata de refresco tiene 30 gramos de azúcar, por lo que se recomienda dejar de beber bebidas azucaradas para perder peso. Cabe mencionar que el consumo de bebidas azucaradas y muchas veces carbonatadas genera un repunte de hígado graso y sobrepeso en la población mundial, ya que el azúcar pasa directamente a la sangre y se acumulan de manera muy rápida en los depósitos de grasa y en el hígado.
Cambio de hábitos alimenticios
El experto señala que si se quiere consumir refrescos lo ideal es seleccionar los que tengas cero calorías, pero aun así advierte que son bebidas carbonatadas con edulcorantes. Como tal, el consumo de azúcar está estrechamente relacionado con los cambios conductuales a la hora de comer y también hay una diferencia entre el conteo de calorías y el gusto por el dulzor, haciendo que sea más difícil dejar de comer azúcar.
Evitar el consumo de pan blanco
Muchas personas tienen el hábito de consumir pan blanco con frecuencia, pero al suprimir este alimento de su dieta aumentan las posibilidades de regular el peso corporal, pues cada porción de pan blanco aporta unas 250 calorías y hay personas que lo consumen en las tres comidas. Por otra parte, el consumo de este alimento, junto con otros ingredientes como salsas, carnes, cremas, se traduce en aumento de la grasa abdominal.
Consumir frutas
A pesar de que estos alimentos son ricos en azúcar, se recomienda su consumo masticado y evitar tomarlas en jugos y en otras preparaciones. Esto se debe a que cuando se mastica la fruta se ingiere la fructosa, el agua y también la fibra, y esto trae como consecuencia que el cuerpo la absorba de manera más lenta. Pero cuando se consume por medio de jugos de fruta, la fructuosa pasa directamente a la sangre.