Cada 5 de septiembre el mundo conmemora el Día del Mieloma Múltiple, un tipo de cáncer en la sangre que se presenta con mayor frecuencia en hombres y en personas mayores de 65 años.
Se trata de una enfermedad que puede ser bastante agresiva y poner en riesgo la vida de los pacientes. Su espectro de supervivencia está entre los 3 y 4 años, y solo un 3 por ciento de los pacientes con este cáncer vive más de 10 años.
El mieloma múltiple es una enfermedad tumoral que representa el 1 por ciento de los casos de cáncer en el mundo. Y es causada por la producción anormal de un tipo de células de la sangre conocidas como plasmocitos, las cuales son responsables de la producción de anticuerpos y defensas, por lo que ayudan a proteger el cuerpo contra los gérmenes y otras sustancias malignas.
Con el paso del tiempo, las células del mieloma se acumulan en la médula ósea, donde se encuentran las células de la sangre.
Cuáles son los síntomas
Los síntomas de esta enfermedad pueden ser recordados con el acrónimo CRAB, que incluye:
- C (calcio): elevación de calcio en la sangre, que puede llevar a cálculos renales, confusión, olvidos frecuentes y palpitaciones cardíacas irregulares.
- R (riñón): fallo renal que se evidencia en una disminución en la producción de la orina y la acumulación de toxinas.
- A (anemia): reducción significativa de las células que transportan oxígeno en la sangre, lo que provoca síntomas como fatiga y cansancio.
- B (bone, que traduce hueso en inglés): se trata de un compromiso óseo que puede resultar en fracturas u osteoporosis.
El impacto de estos síntomas en la vida cotidiana de los pacientes llega a ser significativo, pues la fatiga y el dolor constantes pueden limitar la capacidad de la persona para llevar a cabo actividades diarias; es decir, se ve reducida su independencia.
Además, las complicaciones renales y óseas requieren tratamientos médicos frecuentes, así como numerosas hospitalizaciones, lo que genera un deterioro adicional en la calidad de vida del paciente.
Detección y avances científicos
En Colombia, el 68 por ciento de pacientes con mieloma múltiple recibe diagnósticos erróneos, debido al desconocimiento de la patología. Sin embargo, las innovaciones recientes en materia de pruebas diagnósticas han transformado el manejo de la enfermedad.
Las técnicas modernas ayudan a determinar su agresividad y a personalizar los tratamientos, lo que mejora las opciones disponibles para los pacientes.
De acuerdo con Alejandro Ruíz, director médico del Centro de Investigación y Diagnóstico en Biología Molecular, Fimac, “las pruebas modernas conocidas con el nombre de FISH, PCR y NGS permiten evaluar un gran número de genes relacionados con el pronóstico de la enfermedad. Y, aunque el mieloma múltiple sigue siendo un desafío significativo para quienes lo padecen, los avances en la biología molecular y la atención personalizada están ofreciendo una nueva esperanza, mejorando la calidad de vida de los pacientes y sus familias”.
Para este especialista, resulta “esencial continuar apoyando la investigación y el desarrollo de terapias, así como facilitar el acceso a un diagnóstico temprano y preciso para quienes luchan contra esta enfermedad”.