Cuando una persona sufre de mala circulación puede presentar fatiga, edema, mareos, dolor de cabeza, manos y pies fríos, dolor en las piernas, calambres musculares, latidos cardíacos irregulares, pérdida de cabello y sequedad de la piel, entumecimiento u hormigueo en partes del cuerpo, entre otros síntomas.
Si una persona desea mejorar la circulación, debe tener en cuenta algunos aspectos como dejar de fumar, reducir la ingesta de grasas saturadas y tratar de no permanecer sentado por períodos prolongados, indica el medio especializado Medical News Today.
En el marco de una buena alimentación, existen alimentos que pueden ayudar a mejorar la circulación. Uno de estos son las nueces.
El gran contenido de las nueces en omega-3, los cuales son ácidos grasos necesarios por el efecto antiinflamatorio que tienen, y en vitamina B3, la cual es reconocida por el efecto vasodilatador que crea en el organismo, convierten a este alimento en un ingrediente esencial para que la sangre circule de la mejor manera.
Adicionalmente, según el diario de salud y bienestar Journal of Nutrition, las nueces pueden mejorar drásticamente los niveles de colesterol y triglicéridos de una persona y mejorar la situación de los pacientes cardiovasculares.
En un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Ciencias de la Familia y del Consumidor de la UGA, los participantes con riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares que comieron nueces durante una intervención de ocho semanas mostraron mejoras significativas en el colesterol total, los triglicéridos y la lipoproteína de baja densidad (LDL), o colesterol ‘malo’.
Más recomendaciones
Otras recomendaciones para mejorar la circulación sanguínea, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación y Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, son las siguientes:;
1. Hacer ejercicio, pues la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar diariamente mínimo treinta minutos de alguna actividad física.
2. Mantener un peso saludable, ya que esto permite que la persona tenga un buen estado de salud y calidad de vida.
3. Dejar de fumar.
4. Si la persona tiene diabetes, mantener bajo control la glucosa en la sangre.
5. Reducir los niveles de colesterol y presión arterial, si es necesario.
6. Consumir alimentos bajos en grasas saturadas.
7. Programar y asistir a las revisiones médicas con regularidad.
8. Informar al médico sobre cualquier antecedente familiar de problemas relacionados con el corazón.
9. Practicar yoga, porque al combinar posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación mejora la salud en general.
10. Comer pescado, pues el pescado es una proteína magra y saludable que contiene un tipo de grasa llamada omega 3 y ácidos grasos que puede ayudar a proteger el corazón.
11. Mantener los niveles de hierro balanceados.