En el planeta hay diferentes tipos de climas, al haber muchos puntos del globo que tienen estaciones. Entonces, debido a esto, se experimentan diversos cambios en las temperaturas.
Ante todas estas modificaciones a las que puede estar expuesto el cuerpo, el mismo puede adaptarse, acoplarse o acostumbrarse, y por ello, al cambiar de clima, respectivamente, el cuerpo reacciona, ya sea con alergia u otro tipo de respuesta.
Vale mencionar que hay lugares donde las temperaturas son templadas y alcanzan 18 °C, así como hay otros lugares donde el promedio diario es de 25 a 31 °C, y en época de verano, estas pueden ascender a 38 °C.
Así las cosas, en este tipo de climas se pueden presentar algunas afecciones debido al calor que sofoca a las personas. Porque el sol podría tener efectos en la piel.
De acuerdo con el sitio web del Departamento de Relaciones Industriales del Estado de California, explican que en el clima cálido, el cuerpo puede sobrecalentarse y si eso ocurre, “los vasos sanguíneos se agrandan y el latido del corazón es más fuerte y más rápido”.
“Más sangre fluye a las capas externa de la piel desde el ‘núcleo’ interior, de modo que el calor puede ser liberado al medio ambiente más fresco. Si este proceso no ayuda a enfriar al cuerpo lo suficientemente rápido, o el aire exterior es más calurosos que la piel, el cerebro activa la sudoración para enfriar el cuerpo”, agrega.
Por lo que las glándulas de sudor en la piel, “sacan agua del torrente sanguíneo haciendo el sudor. El sudor se evapora y libera el calor del cuerpo. Durante una hora de trabajo pesado en tiempo caluroso, el cuerpo puede sudar fácilmente un litro de agua”, causando de esta manera, deshidratación, debido a que el cuerpo está compuesto en un 60 % por agua.
En ese mismo hilo, destacan que puede aparecer también: “El salpullido por calor, calambres por calor, desmayos, agotamiento por calor e insolación”.
Por su parte, Medline Plus enlista otras posibles enfermedades que ocurren cuando se está expuesto a altas temperaturas:
- “Golpe de calor: peligroso para la vida porque la temperatura corporal puede subir por encima de los 106 °F en minutos (41 °C). Los síntomas incluyen piel seca, pulso rápido y fuerte, mareos, náusea y confusión. Si ve alguno de estos signos, busque ayuda médica de inmediato.
- Agotamiento por calor: Una enfermedad que puede ocurrir después de varios días, expuesto a altas temperaturas y sin suficientes líquidos. Los síntomas incluyen sudoración profusa, respiración rápida y pulso rápido y débil. Si no recibe tratamiento, puede preceder al golpe de calor.
- Calambres por calor: Dolores o espasmos musculares que ocurren durante el ejercicio intenso. En general, puede sufrirlos en el abdomen, los brazos o las piernas.
- Erupciones cutáneas por calor: Irritación de la piel por exceso de sudoración. Es más común en niños pequeños”.
Teniendo en cuenta esto, el consumo de líquido con frecuencia se hace indispensable para evitar, por ejemplo, una deshidratación. Esto puede ocurrir cuando se presenta la insolación, que es cuando el cuerpo está expuesto al sol, al punto que el cuerpo ya no puede regular su propia temperatura y se calienta en exceso. Ocasionando fiebre con altas temperaturas corporales de hasta 40° C.
Por su parte, Tatiana Bermudez, líder en salud de EPS Famisanar, asegura que “la exposición al sol, sin los debidos cuidados, puede causar envejecimiento prematuro, enrojecimiento, quemaduras de primer y segundo grado, insolación, convulsiones, vómitos, manchas y arrugas en la piel, así como alterar el sistema inmunológico”.
Por lo cual, es vital el uso de protector solar diario, con factor de protección solar (FPS) de al menos 50, es un excelente aliado antienvejecimiento que previene las manchas y el cáncer de piel.