La vitamina K es un nutriente que el cuerpo necesita para la coagulación de la sangre y la salud de los huesos, y para otras funciones del cuerpo, de acuerdo con los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).

Por ello, para obtener vitamina K, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, señaló que esta se encuentra en los siguientes alimentos:

La vitamina K se encuentra naturalmente presente en muchos alimentos. | Foto: Getty Images
  • El pescado, el hígado, la carne de res, los huevos y cereales (contienen cantidades más pequeñas).

De igual forma, la vitamina K se encuentra sola en suplementos de vitamina K, o en suplementos de vitamina K con otros nutrientes como el calcio, el magnesio y/o la vitamina D. “Las presentaciones comunes de la vitamina K son en forma de filoquinona y fitomenadiona (conocidas también como vitamina K1), y menaquinona-4 y menaquinona-7 (conocidas también como vitamina K2)”, explicaron los NIH.

Además, hay que señalar que las bacterias en el colon fabrican cierta cantidad de vitamina K que el cuerpo absorbe.

Ahora bien, respecto a las cantidades, los NIH indicaron que dependen de la edad y el sexo, pero en promedio las recomendaciones son:

  • 7 a 12 meses de edad: 2.5 mcg
  • 1 a 3 años de edad: 30 mcg
  • 4 a 8 años de edad: 55 mcg
  • 9 a 13 años de edad: 60 mcg
  • 14 a 18 años de edad: 75 mcg
  • Hombres adultos mayores de 19 años de edad: 120 mcg
  • Mujeres adultas mayores de 19 años de edad: 90 mcg
La vitamina K es vital para el buen funcionamiento del organismo | Foto: Libre de derechos
  • Adolescentes embarazadas o en período de lactancia: 75 mcg
  • Mujeres embarazadas o en período de lactancia: 90 mcg

¿Qué ocurre si no se consume suficiente vitamina K?

Según los NIH, la deficiencia grave de vitamina K puede provocar hematomas (moretones) y problemas de sangrado debido a que la coagulación de la sangre es más lenta.

Asimismo, indicó que la deficiencia de vitamina K podría reducir la fuerza de los huesos y aumentar el riesgo de osteoporosis, ya que el cuerpo necesita la vitamina K para la salud ósea.

¿Quiénes no obtienen suficiente vitamina K?

Algunas personas tal vez tengan dificultades para obtener suficiente vitamina K, como, por ejemplo:

  • Los recién nacidos que no reciben una inyección de vitamina K al nacer.
  • Las personas con determinados trastornos (como la fibrosis quística, la enfermedad celíaca, la colitis ulcerosa, el síndrome de intestino corto) que disminuyen la cantidad de vitamina K que el cuerpo absorbe.
  • Las personas que han tenido cirugía bariátrica.

¿Puede la vitamina K ser perjudicial?

En el portal de los Institutos se señala que no se ha demostrado que la vitamina K cause daño alguno. Sin embargo, podría interactuar con algunos medicamentos, en especial la warfarina (Coumadin®) que es un anticoagulante.

Los coágulos no permiten el paso de la sangre. | Foto: Getty Images

“Si se toma warfarina, hay que asegurarse de que la cantidad de vitamina K que consume a través de alimentos y suplementos sea la misma todos los días. Un cambio repentino en la cantidad de vitamina K ingerida podría causar sangrado peligroso (si consume menos) o coágulos sanguíneos (si consume más)”, puntualizaron los NIH.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.