El 8 de diciembre de 2021 todos los ojos del mundo estuvieron puestos en la vacunación contra la covid-19 de Margaret Keenan, una mujer británica de 91 años que se convirtió en la primera persona en ser vacunada con la dosis anticovid de Pfizer. Fue el primer pinchazo contra el nuevo coronavirus que se aplicó en los países occidentales, pues para ese entonces el Gobierno ruso ya había empezado su campaña de inmunización.
A poco más de dos años de este hito histórico, las cuentas de la universidad Johns Hopkins apuntan a que ya se han aplicado más de 13.165 millones de dosis anticovid en todo el mundo. Algunas de las casas farmacéuticas que más vacunas han producido contra la covid-19 son Pfizer y su socio BioNTech.
Esta inmunización masiva ha permitido salvar millones de vidas y, con ello, lograr que los picos de casos de covid-19 dejen de ser tan mortales como lo fueron en otros años. No obstante, en el transcurso de estos dos años se han hecho frecuentes los reportes de efectos secundarios, que en su mayoría son leves y no afectan a todas las personas que se aplican las vacunas.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) han vigilado de cerca estos eventos adversos y han hecho públicos sus resultados a través de su repositorio en línea.
Además, ha clasificado estas reacciones por grupos de edad para verificar cuáles son más comunes dependiendo de cada grupo etario, haciendo especial énfasis en niños y niñas.
Las reacciones adversas más frecuentes por edades
Para empezar, los CDC han reportado que el grupo más joven que en la actualidad está recibiendo la vacuna son los niños que tienen entre seis meses y cuatro años. Según los datos de los CDC, las reacciones locales en el lugar de aplicación de la vacuna fueron algunos de los eventos más comunes en estos pacientes.
“Las reacciones locales fueron reportadas por la mitad (48 %) de los que recibieron la vacuna y en tasas más altas que las que recibieron el placebo”, indicaron los CDC. La frecuencia de estos fue más baja después de aplicarse la tercera dosis anticovid.
“El enrojecimiento en el lugar de la inyección fue la segunda reacción local notificada con más frecuencia. El enrojecimiento se informó con una frecuencia ligeramente mayor en el grupo de mayor edad que en el grupo de menor edad (10,9 % frente a 7,5 % después de la dosis 3)”, concluyeron.
A su vez, indicaron que la reacción adversa sistémica más frecuente después de cualquier dosis fue irritabilidad (43,6-51,2 %) entre las edades de 6 a 23 meses y fatiga (24,5-29,7 %) entre las edades de dos a cuatro años.
Las reacciones locales fueron más comunes en niños más grandes. Según los CDC, entre los pacientes que tenían de 5 a 11 años, 86,2 % presentó al menos una reacción local en el lugar de la inyección en los siete días posteriores a la vacunación. La reacción más frecuente fue el dolor en el lugar de la inyección.
“La mediana de aparición de las reacciones locales en el grupo vacunado fue de uno a dos días después de cualquiera de las dosis y tuvo una mediana de duración de uno a dos días”, concluyeron.
Y señalaron que en los niños de estas edades, el 66,6 % informó al menos una reacción sistémica en la semana siguiente a la vacunación. “La fatiga, el dolor de cabeza, los escalofríos y el dolor muscular nuevo o empeorado fueron los (síntomas) más comunes”, explicaron.
En el caso de los adolescentes entre los 12 y los 15 años se presentaron reacciones locales en el 90,9 % de los casos y reacciones sistémicas en el 90,7 % de los casos a siete días de la vacunación. Señalaron que el dolor en el lugar de la inyección fue la reacción local más común y grave entre los vacunados y fue un poco más frecuente después de la segunda dosis.
Para las personas mayores de 18 años indicaron que el 84,7 % de los vacunados informó que tuvo al menos una reacción local en el lugar de la inyección.
“Por grupos de edad, el 88,7 % del grupo más joven (de 18 a 55 años) y el 79,7 % del grupo de mayor edad (>55 años) refirieron al menos una reacción local”, concluyeron. A su vez, se conoció que en estas edades los efectos secundarios más comunes fueron la fatiga, el dolor de cabeza y el dolor muscular nuevo o empeorado.