El síndrome de Asperger, un tipo de autismo que en algunas ocasiones afecta la vida cotidiana, se ha incrementado aún más tanto en los niños, adolescentes y adultos, influyendo en gran manera en la forma en que una persona interpreta el idioma, se comunica y socializa. Sin embargo, son varios los famosos y ‘genios’ que padecen esta enfermedad y aun así han triunfado reconocidamente en sus ámbitos.

Con anterioridad, el Asperger fue incluido entre los Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD) y hoy se encuentra incorporado dentro de los Trastornos del Espectro Autista (TEA). Asimismo, el término trastorno está siendo reemplazado por el de Condición (CEA), conforme se entiende que el mismo es solo una variación más de la diversidad humana.

Las señales de autismo en niñas y mujeres no son los mismos que en niños y hombres.

Para la detección de este síndrome, inicialmente hasta 2013, solía considerarse una afección en sí misma, con su propio diagnóstico. No obstante, después de ese año, la guía que utilizan los médicos, el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, comúnmente conocido como DSM-5, según citó el sitio web de Johns Hopkins All Children’s Hospital, la clasificación del síndrome de Asperger fue cambiada, por lo que las personas que presentan señales del síndrome de Asperger “se les diagnostica autismo y se los considera como parte del ‘espectro autista’”.

“El término ‘espectro autista’ hace referencia a una amplia variedad de trastornos del desarrollo, que pueden aparecer en diferentes combinaciones y con distintos niveles de gravedad. Como consecuencia, se suelen utilizar expresiones de tipo general, como ‘bajo funcionamiento’, ‘alto funcionamiento’, ‘tendencias autistas’ o ‘trastorno generalizado del desarrollo’, para describir los comportamientos que se encuentran dentro del espectro autista”, señaló Johns Hopkins All Children’s Hospital en su plataforma.

El síndrome de Asperger es un tipo de autismo. | Foto: Getty Images

De acuerdo al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades del Gobierno de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), alrededor del 1% de la población mundial tiene algún tipo TEA.

Según el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares de los Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), el Asperger se caracteriza por aparecer en personas con “intereses limitados o una preocupación inusual con un objeto en particular hasta la exclusión de otras actividades como rutinas o rituales repetitivos, peculiaridades en el habla y el lenguaje, como el hablar de manera demasiado formal o monótona, o tomar las figuras retóricas literalmente, comportamiento social y emocionalmente inadecuado y la incapacidad de interactuar exitosamente con los demás”.

En pocas palabras, este síndrome se caracteriza por la dificultad de una persona para la interacción social, las obsesiones, los patrones del habla extraños, pocas expresiones faciales y otras peculiaridades que se vuelven evidentes.

Aunque se desconoce su causa, hay fuerte consenso en la comunidad científica en señalar que es de orden neurobiológico. De la misma manera, hay una aceptación universal acerca de que el mismo no se produce por problemas afectivos ni por el tipo de educación recibida.

La corteza prefrontal es la encargada de las funciones cognitivas.

Signos y síntomas del síndrome de Asperger

De acuerdo con el medio citado, este síndrome puede asemejarse con otros problemas del comportamiento. Para su detección, lo más conveniente es siempre consultar con un médico o profesional de salud, experto en el tema, que apruebe o descarte el diagnóstico, que es muchas ocasiones suele desarrollarse en la infancia.

  • Interacciones sociales mínimas o inadecuadas.
  • Conversaciones que casi siempre tratan sobre sí mismos en lugar de los demás
  • Lenguaje “cifrado”, “robótico” o repetitivo.
  • Falta de “sentido común”.
  • Problemas para leer, escribir y para la matemática.
  • Obsesiones con temas complejos, como ciertos patrones visuales o musicales.
  • Capacidades cognitivas no verbales normales o por debajo de la media, aunque sus capacidades cognitivas verbales suelen ser normales o superiores a la media.
  • Movimientos extraños.
  • Comportamientos y gestos extraños.

Cabe aclarar que, estos signos y síntomas del síndrome de Asperger, a diferencia de los niños con autismo, “tal vez no presenten ningún retraso en el desarrollo del lenguaje; suelen tener buenas aptitudes gramaticales y un vocabulario avanzado a edades tempranas. Sin embargo, muchos de ellos presentan un trastorno del lenguaje”, precisó la fuente citada.