Luego de varios días de receso del debate público sobre el estado del sector salud, este miércoles se han reactivado los argumentos a favor y en contra de temas como la reforma y las deudas de las EPS liquidadas.

Lo más reciente en esta discusión fue el pronunciamiento del ex ministro de Salud del gobierno de Iván Duque, Fernando Ruiz.

“Mérmele a los 16,6 por lo menos 15 billones de cartera corriente (las deudas normales de operación de cualquier negocio) y porfa, diferencie en los 33 las deudas radicadas de liquidadas. En liquidación, Saludcoop radicaron 8 billones y quedaron 2 como deuda cierta. No más fantasías”, escribió a través de su cuenta de Twitter y como respuesta a una declaración que en la mañana, la ministra Carolina Corcho hizo en esta misma plataforma.

Ministra de Salud y Protección Social, Carolina Corcho Mejía. | Foto: Ministerio de Salud y Protección Social

“Entre las EPS liquidadas y en liquidación quedaron debiendo 33 billones a clínicas y hospitales y la deuda actual es de 16, 6 billones, casi 50 billones de pesos es el hueco fiscal con entidades que atienden a los pacientes. Importante ese dato Revista Semana para el análisis”, escribió la jefe de la cartera de salud del gobierno de Gustavo Petro.

El exministro de Salud Fernando Ruiz y la ministra de salud Carolina Corcho, en debate por decisiones administrativas. | Foto: Semana

¿Por qué empezó esta vez la controversia?

Luego de una alerta que hizo la organización gremial Acemi en entrevista con SEMANA, la alta funcionaria reaccionó en Twitter.

En dicha conversación, estas EPS aseguraron que el Gobierno Petro les debe 2,6 billones de pesos, no les paga y las está asfixiando, por lo que las consecuencias son gravísimas para los colombianos.

SEMANA: ¿A cuánto asciende la deuda del Gobierno con las EPS?

Paula Acosta: De acuerdo con los cálculos que tenemos en Acemi, las deudas por cuenta de Presupuestos Máximos, es decir el costo de las atenciones en salud que no hacen parte del Plan de Beneficios con cargo a la UPC, ascienden a $ 2,6 billones sumando 2021 y 2022. Esto no tiene en cuenta otras deudas que son menores, como un saldo de Presupuestos Máximos de 2020 por $ 356 mil millones, o las canastas covid. Recordemos que el último pico se dio en febrero de 2022.

La presidenta de Acemi, Paula Acosta, ha advertido del desfinanciamiento de la salud. Asegura que gracias a las EPS los colombianos tienen la posibilidad de tener un sistema en el que se cubren todas las enfermedades. | Foto: Diana Rey Melo

SEMANA: ¿Cómo se llegó a esa situación de no pago?

Paula Acosta: Es claro que hay un problema en la forma en la que se calculan los Presupuestos Máximos. Todos los años el gasto real ha estado muy por encima de lo presupuestado por el Gobierno y los pagos y adiciones se han demorado. Esto conlleva a que las EPS deban pagar con recursos propios estas prestaciones, por las cuales no reciben contraprestación alguna, ni por los trámites administrativos ni por la auditoría que realizan.

Si bien los montos más importantes corresponden a 2021 y 2022, hay deudas desde 2020 año en el que empezó esta nueva metodología. Cuando el gobierno tiene deudas de más de dos años esto es prácticamente imposible cumplir los pagos a proveedores y prestadores de forma oportuna.

Lo que se cubre por Presupuestos Máximos es solo una fracción de las millones de atenciones en salud que se hacen a diario. Vale la pena preguntarse por las capacidades reales de la Adres, que es la tesorería del Sistema de Salud, para asumir más pagos de forma directa.

El exministro Fernando Ruiz dijo que “Colombia ha tenido muy buenas EPS y las sigue teniendo. El activismo no tiene sentido cuando se habla de la salud de los colombianos”. | Foto: Juan Carlos Sierra

SEMANA: ¿Qué implicaciones tiene estas demoras en los pagos a las EPS?

Paula Acosta: Genera una afectación en todo el Sistema de Salud, siendo el más afectado el usuario. Al dejar sin capital de trabajo a las EPS esto se transmite a los prestadores como clínicas, hospitales, laboratorios, centros de imágenes, gestores farmacéuticos, los profesionales independientes, y estos a su vez con sus trabajadores. El resultado final es aumento de carteras, afectaciones en los servicios que reciben los colombianos, ya que al no tener pagos oportunos algunos prestadores deben cerrar servicios o disminuir su capacidad, lo que se ve también reflejado en los tiempos de espera para citas y otros procedimientos. Por último, como hemos visto en otros países, esto termina en mayor gasto de bolsillo para los hogares.