La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó el pasado 20 de mayo que está poniendo en marcha una red mundial para proteger a la población frente a amenazas y enfermedades infecciosas provenientes de agentes patógenos.
Bajo el nombre de la Red Internacional de Vigilancia de Patógenos (IPSN), se pondrá a disposición de los países y regiones a nivel mundial una plataforma que recopilará análisis de muestras y guardará información que servirá para monitorear las infecciones que amenazan la salud de los habitantes y a la salud pública en general.
Este sistema permitirá analizar el código genérico de los virus, bacterias y otros microorganismos detonantes de enfermedades, lo cual permitirá saber dónde están sus focos de contagio y el modo de propagación. La información de esta amplia base de datos podrá ser empleada por científicos y responsables de la salud pública, permitiendo que el desarrollo de vacunas y tratamientos sean más eficaces.
Por medio de la intervención de la oficina del Centro de Información de la OMS sobre Pandemias y Epidemias, se reunirá la información de diversos expertos a nivel mundial que trabajan en el sector de análisis de datos para la prevención de patologías y que operan de la mano con las entidades gubernamentales, fundaciones, organizaciones multilaterales, sociedad civil, mundo académico y sector privado de sus respectivas naciones.
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, señaló que el propósito de esta vasta red es desempeñar un papel fundamental en la seguridad sanitaria para poner al alcance a todos los países la información suficiente para hacerle frente a los agentes patógenos que amenazan la salud de las personas, tal y como quedó demostrado en la pandemia por la Covid-19.
La organización señala que la pandemia de hace un par de años colocó sobre la mesa una reflexión sobre el papel de la salubridad pública en las sociedades del mundo, especialmente en el modo para reaccionar ante una amenaza que ponga en riesgo la salud de todos. Si no se hubiera obtenido la secuencia del genoma del coronavirus, las vacunas no se habían producido y distribuido a la velocidad que lo hicieron. Por lo tanto, para la OMS es importante contar con esta mega base de datos ante cualquier emergencia.
“La genómica es un elemento fundamental para lograr la eficacia de la preparación y respuesta frente a las epidemias y pandemias, además de un componente de la vigilancia en curso de una amplia variedad de enfermedades, desde las de transmisión alimentaria y la gripe hasta la tuberculosis y el VIH”, señaló la OMS.
Como consecuencia de lo acontecido en la pandemia, la OMS indicó que los países han aumentado su capacidad genómica para fortalecer sus sistemas e instituciones de salubridad pública bajo la recopilación de información y datos que permitan analizar la información y orientar las políticas públicas en esta área. Sin embargo, el intercambio de data, prácticas e innovaciones todavía son insuficientes para construir una arquitectura sólida de vigilancia de salud a nivel mundial. La organización espera que esta red mejore esa situación.
La red abordará los retos que hay actualmente a nivel mundial en el sector salud, principalmente aquellos que tienen que ver con la detección, prevención y respuesta frente a las amenazas de enfermedades. Además, esperan que la red conecte a los países del globo, tanto los desarrollados como los que no cuentan con los recursos suficientes, para que el sistema de salubridad mundial se caracterice por la unión entre las naciones.