La felicitación de la institución de salud más importante del continente se extendió al Ministerio de Salud y Protección Social, al Instituto Nacional de Salud y a las secretarías de salud departamentales y municipales.

“Reconocemos el trabajo de los equipos de vigilancia en salud pública, en laboratorio y en vacunación que han logrado para Colombia mantener el concepto de la Comisión Regional de Monitoreo y Reverificación de la Eliminación del Sarampión y la Rubéola”, indicaron a través de su cuenta de Twitter.

El mensaje fue compartido por funcionarios como el secretario distrital de salud, Alejandro Gómez, quien agradeció a las personas que hacen posible que Colombia conserve dicho logro.

“A todas (os) mis colegas: las y los secretarios de salud de cada departamento y ciudad, a sus maravillosos equipos de vacunación y vigilancia epidemiológica. A esas miles de personas que no salen en noticias, ni en redes sociales, pero que son las verdaderas razones de este logro: gracias”, escribió en su perfil de Twitter.

También el ex ministro de salud, Fernando Ruiz aseguró que dicho reconocimiento se debe a la calidad técnica de los funcionarios.

“Un gran esfuerzo se hizo desde el Ministerio de Salud y Protección Social y el Instituto Nacional de Salud, para apoyar durante muchos meses a los departamentos en el control de los brotes de enfermedad. Se pudo mantener el status de eliminación en el país gracias a la calidad técnica de los funcionarios de esas instituciones”, expresó.

Panorama del sarampión y la rubéola

El Ministerio de Salud indicó a comienzos de este 2021, que Colombia fue certificado en el año 2014 como país libre de sarampión y la región de las Américas también logró dicha certificación en el año 2015, sin embargo, surgieron brotes emergentes que conllevó a que cada país trabajara y lograra su certificación individual cada año para garantizar que realmente son países libres de sarampión, rubéola y rubéola congénita.

La sostenibilidad de la eliminación del sarampión, la rubéola y síndrome de rubéola congénita en las Américas se vio afectada por la pandemia mundial de Covid-19. Debido al surgimiento de más brechas de inmunidad, así como reducciones en el desempeño de los indicadores de vigilancia epidemiológica en casi todos los países de esta región.

“La disminución de los casos sospechosos de sarampión y rubéola en el 2020 puede deberse en gran medida al distanciamiento físico y otras medidas de control contra la pandemia y puede conducir a una falsa sensación de seguridad con respecto a la transmisión de casos de sarampión y rubéola”, explicaron.

¿Qué es el sarampión?

El Instituto Nacional de Salud, en el Protocolo de Vigilancia de Sarampión y Rubéola, explica que esta es una enfermedad eruptiva aguda, sumamente contagiosa causada por un virus.

“Clínicamente, se diferencian dos etapas en la enfermedad: la primera, llamada fase prodrómica, pre-exantemática o catarral, se caracteriza por fiebre de 38,5° C a 40,5° C y síntomas de las vías aéreas superiores, tos y coriza (rinorrea), además de una fuerte conjuntivitis; en algunas ocasiones, es posible detectar las llamadas manchas de Koplik, signo característico del sarampión”.

La segunda fase, llamada exantemática o eruptiva, se da al tercer o cuarto día del inicio de la enfermedad y se refiere a una erupción característica con manchas rojas parduscas, que comienzan en la cara y después se generalizan; dura de cuatro a siete días y a veces termina con una descamación fina.

¿Qué es la rubéola?

También en el Protocolo de Vigilancia, el INS explica que entre las características clínicas de la rubéola, están que es una enfermedad infecciosa, exantemática, viral, aguda, altamente contagiosa, caracterizada por fiebre, rash máculo-papular difuso puntiforme.

“Los niños usualmente presentan pocos o ningún síntoma, pero los adultos pueden presentar pródromos por 1-5 días de fiebre leve (<39°C), cefalea, malestar general, coriza y conjuntivitis. La característica clínica más relevante es la presencia de linfadenopatías pos-auriculares, occipitales y cervicales posteriores y precede al rash en 5-10 días. El exantema tiene máxima intensidad en el segundo día y desaparece hasta el sexto día; no se presenta descamación”.