La Liga Colombiana contra el Cáncer, lanzó la campaña ‘Desvapeate tu salud no es un juego’, con el objetivo de formar líderes estudiantiles de colegios de todo el país, que orienten, acompañen y sensibilicen a los niños, niñas y adolescentes sobre el impacto negativo de vapear, cómo pueden dejar de hacerlo y prevenir el uso temprano de estos dispositivos.
Hay razones de sobra para hacerlo: el estudio ‘Primeros datos de la enfermedad asociada al vapeo en Colombia’, realizado por la Asociación Colombiana de Neumología y Cirugía de Torax; la Encuesta Nacional de Sustancias Psicoactivas de Colombia (ENCSP) y los informes de fallecimientos del DANE revelan que, entre 2020 y 2022, se presentaron 245 casos de enfermedades relacionadas con el vapeo y 59 muertes asociadas, con una prevalencia de consumo del 4,37%.
El consumo habitual de cigarrillos electrónicos en el país está concentrado en Bogotá, Caldas, Antioquia, Valle del Cauca y Boyacá, con un 60% de consumidores adultos jóvenes. Y se pudo establecer que los territorios que reportaron un mayor número de muertes son Antioquia (69%) y Boyacá (27%), seguidos por Sucre (1,69%) y Tolima (1,69%).
Además, el estudio ‘Prevalencia y Factores psicosociales asociados al consumo de Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina’, en población universitaria de Bogotá, reveló que el 37,8% de los estudiantes de pregrado ha usado cigarrillos electrónicos alguna vez.
Es de resaltar que 48% de los universitarios dicen haber probado el cigarrillo electrónico antes de los 19 años. El 5% de los estudiantes, afirman haber agregado cannabis a sus cigarrillos electrónicos y el 26,7% también ha consumido cigarrillo convencional en los últimos 30 días.
Para la Liga Colombiana contra el Cáncer, cada vez hay más pruebas de que los vapeadores podrían estar asociados con lesiones pulmonares. Y la OMS advierte que el uso de estos productos incrementa tres veces más el riesgo de fumar cigarrillos convencionales e incluso de otras sustancias psicoactivas, y de generar adicción.
Los aerosoles de la mayoría de los vapeadores contienen productos químicos tóxicos, incluida la nicotina, y sustancias que pueden causar cáncer; además están asociados con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y trastornos pulmonares.
Este viernes 31 de mayo, en el Día Mundial Sin Tabaco, la liga convoca un evento cultural y educativo que reunirá a estudiantes y docentes de varios colegios distritales que han participado en estas mesas de trabajo de la campaña ‘Desvapeate tu salud no es un juego’.
Y durante el mes de mayo, se desarrollaron mesas de trabajo y talleres de sensibilización en diferentes colegios distritales y departamentales de todo el país, en donde se convocaron a niños y adolescentes para hacer parte de comités de convivencia, con el fin de capacitarlos como líderes multiplicadores sobre el peligro de los vapeadores, las sustancias tóxicas que los componen, la contaminación ambiental que generan estos dispositivos y todos los riesgos que implica esta tendencia en las nuevas generaciones.
Ley de regulación, gran paso en Colombia
Para la Liga Colombiana contra el Cáncer, la aprobación de la Ley 2354 del 9 de mayo de 2024, que regula el uso de vapeadores en Colombia, marca un hito en el país para la salud pública y supone un importante paso hacia la protección de la infancia y la juventud contra los riesgos asociados al consumo de estos productos.
Estos representan una preocupación creciente debido a su proliferación y al impacto en la población colombiana. La ley aborda la regulación de los Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina, los Sistemas Similares Sin Nicotina y los Productos de Tabaco Calentado.
Con esta medida, los cigarrillos electrónicos deberán:
- Tener advertencias sanitarias de tamaño adecuado en los empaques que informen sobre los efectos nocivos de su consumo.
- Prohibir la publicidad, promoción y patrocinio en todos los medios de comunicación.
- Crear controles estrictos para su comercialización.
- Liberar los espacios públicos de aerosol (abiertos y cerrados).
“Logramos que en Colombia se empiecen a regular los cigarrillos electrónicos o vapeadores, que representan una preocupación creciente para la salud pública debido a su proliferación y al impacto en la juventud colombiana”, asegura Blanca Llorente, economista, salubrista pública y asesora en temas de tabaco de la Liga Colombiana Contra el Cáncer.
Agrega que estos productos “están siendo muy asequibles, inclusive en entornos educativos, para niños y jóvenes, público objetivo prioritario de la industria para atraer a nuevos clientes. Los estudios, basados en evidencia y libres de conflicto de interés, demuestran que estos dispositivos son altamente dañinos para la salud y no son un mecanismo seguro para dejar de fumar. Por eso, sigue siendo prioritario que, como sociedad, nos unamos para prevenir el aumento de esta amenaza para la salud pública del país”.