La pandemia de covid-19 marcó un nuevo capítulo en la historia de la humanidad. La vulnerabilidad a la que fue enfrentada la especie humana por un virus demostró que la población puede estar en riesgo por factores minúsculos como un microorganismos y mayúsculos como la crisis sanitaria que vivió el país, y el mundo, entre 2020 y 2022.
Una de las principales preocupaciones que tuvo Colombia en un inicio fue la manera en adquirir las vacunas necesarias para la población vulnerable, junto con la dosis de refuerzo que necesitaría cada persona de acuerdo a su edad. Luego de negociaciones los lotes de las vacunas de diferentes laboratorios comenzaron a llegar al país, en donde las personas asistieron masivamente a aplicarse sus dosis.
No obstante, al ver que los casos de covid-19 iban descendiendo en el país, parte de la población dejó de asistir a completar su esquema de vacunación existiendo grandes cantidades de dosis para su aplicación.
Las vacunas pioneras en Colombia
A pesar de que Colombia se encuentra participando activamente de estudios clínicos para elaborar nuevas vacunas junto a la Organización Mundial de la Salud, esta colaboración no ha sido lo suficientemente provechosa como se esperaba.
Codagenix es una de las fórmulas adicionales en la que se está trabajando para superar el covid-19 cuya característica principal consiste en su modo de aplicación el cual es a través de las fosas nasales. De esta referencia se han aplicado más de 190 dosis en Bogotá, Tunja y Villavicencio.
Por otro lado, Medigen es otra de las vacunas que ha estado elaborando el gobierno con la alianza de la OMS la cual se aplica mediante una inyección. De este modelo se han aplicado más de 1.300 en la Bogotá y los departamentos de Boyacá, Quindío, Tolima y Valle del Cauca.
La puesta en marcha de esta colaboración científica ha sido observada de cerca por la Organización Panamericana de la Salud quien ha informado que en la nación “el estudio se llevó a cabo en Cali, Armenia, Ibagué, Tunja, Duitama, Villavicencio y Bogotá, donde colombianos y migrantes accedieron a vacunarse voluntariamente y asisten a los seguimientos necesarios para evaluar la efectividad de las vacunas objeto del estudio. El equipo investigador refiere que el estudio concluirá en marzo de 2024, cuando se cumpla un año de seguimiento a todos los participantes de esta iniciativa mundial. Para entonces se realizarán publicaciones globales y nacionales de los resultados encontrados”.
Los menores, la principal preocupación
Una de las poblaciones más vulnerables a este virus es la primera infancia, por lo que, desde la organización Pacientes Colombia, Denis Silva, vocera del colectivo, ha denunciado que en la actualidad existen más de un millón de vacunas cerca de vencerse para niños de entre los 6 meses a los 3 años.
Para estas edades las vacunas bivalentes son las que se deben aplicar, por lo que Silva ha enfatizado en que a pesar de que estas dosis estén autorizadas aún no han llegado al país, además de añadir que AstraZeneca, entre otros laboratorios, carecen de negociaciones con el gobierno Petro.
Con la problemática de las vacunas represadas, la Sociedad Colombiana de Pediatría aconsejó que no se debe dejar de lado la actualización del esquema de vacunación en niños, agregando que la vacuna bivalente se le debería aplicar a infantes mayores de tres años.
Por su parte, desde el Comité de Infectología de la Sociedad de Pediatría, Claudia Beltrán, expresó su apoyo a la Sociedad Colombiana de Pediatría además de añadir que “para los mayores de 6 meses en el país está disponible la vacuna de RNA mensajero de la farmacéutica moderna”.