Las especulaciones sobre el texto de la reforma a la salud han estado a la orden del día y uno de los aspectos que más polémica ha generado tiene que ver con la permanencia de las EPS como actores claves en el sistema.

Por un lado, el Gobierno, en cabeza de la ministra de Salud, Carolina Corcho, ha señalado que las EPS son meras intermediarias financieras. Su argumento es que si les giran la plata a los hospitales públicos y en general a todas las IPS, los recursos fluirán mejor en el sistema de salud y las deudas no llegarán ser tan grandes como hoy.

Las EPS, por su parte, han señalado que no se limitan a la intermediación financiera, pues el sistema les asigna varias responsabilidades con los pacientes: los aseguran, cubren los costos de lo que les sucede a su salud, se encargan de la prevención de enfermedades y gestionan el riesgo en salud.

Además, han argumentado que según recientes mediciones estadísticas entre el 69 % y el 71 % de los colombianos no están de acuerdo con que sean eliminadas como actores claves del sistema de salud, y han señalado que los recursos que les giran desde el Estado (a través del fondo de la Adres) no son suficientes para cubrir todo lo que les cuesta cada paciente.

Al respecto, la ministra Corcho aseguró recientemente que les propone a las EPS convertirse en Redes Prestadoras de Servicios de Salud.

La funcionaria criticó la práctica de la integración vertical en el sistema de salud, que se da cuando una IPS pertenece a los mismos dueños de una EPS y celebran convenios entre sí.

“Estamos invitando a las EPS a la transición”, aseguró la ministra Corcho y aseguró que en el centro de su propuesta de cambio están el fortalecimiento de las redes hospitalarias públicas y la mejora en el acceso a la salud de las comunidades en zonas apartadas del país.

“Los territorios son nuestra vocación y prioridad para la restitución de sus derechos. Por eso estamos aquí, para avanzar juntos por el bienestar de las comunidades del Pacífico, que han sido afectadas por el conflicto y abandono de los gobiernos”, advirtió Corcho durante un evento en el departamento del Cauca.

La funcionaria subrayó la necesidad de que el Estado atienda y busque activamente a las personas que no pueden acceder a los servicios de salud por cuenta de dificultades en materia de transporte y falta de infraestructura adecuada. Y agregó que, en ese sentido, el sistema debe ser “lo más resolutivo posible”.

Y criticó que el sistema de salud se haya convertido en un barril sin fondo que se concentró en procedimientos de alto costo, “y no en un sistema que garantice el derecho fundamental a la salud, por lo que debemos trabajar para que sea lo contrario”.

Se calienta la radicación de la reforma a la salud

En recientes declaraciones, la ministra Corcho anunció que en enero del próximo año el país podrá conocer el texto de la reforma a la salud, que es una promesa de campaña del presidente Gustavo Petro.

Corcho, además, le puso fecha a la radicación del proyecto de ley en el Congreso de la República, que será el responsable de definir qué tanto cambia el modelo de atención en salud en Colombia a partir de lo que propone el Ministerio de Salud.

Según Corcho, el articulado comenzará su curso por el Legislativo a partir del próximo 16 de febrero de 2023.

No obstante, ha recibido fuertes críticas de parte de la oposición debido al hermetismo con el que se está llevando a cabo la construcción del texto de la reforma.

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