La mortalidad materna se ha convertido en uno de los indicadores claves de salud pública tanto para las autoridades como para el Gobierno nacional, que ha señalado que Colombia es el país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) con peor desempeño en la materia.
Por mortalidad materna, las autoridades se refieren a todos los casos de mujeres que mueren mientras se encuentran embarazadas, durante el parto o unas semanas después de haber dado a luz. En otras palabras, se trata de un fallecimiento que está estrechamente relacionado con la gestación.
En su último Boletín Epidemiológico Semanal, el Instituto Nacional de Salud (INS) informó que en lo que va del año se han identificado 41 casos de mortalidad materna a nivel nacional. Tres de los casos correspondieron a mujeres extranjeras, mientras que los otros 38 casos se dieron en mujeres colombianas.
“De los 38 casos residentes en Colombia, 28 corresponden a muertes maternas tempranas. En esta semana epidemiológica ingresaron al Sivigila (el sistema de salud pública) cinco casos, todos corresponden a muertes maternas tempranas”, puntualizó el INS.
La cantidad de fallecimientos ha mostrado una disminución en comparación a los casos registrados en los últimos años. De hecho, el INS mostró que para la misma época del 2020 se habían reportado 55 fallecimientos en maternas colombianas, en 2021 la cifra subió a 66 y en 2022 se situó en 38 casos.
En otras palabras, en lo que va del año se ha registrado una disminución en la mortalidad de mujeres a raíz de su embarazo. No obstante, vale decir que las cifras de 2021 y 2022 fueron fuertemente afectadas por cuenta de la pandemia de covid-19.
Más aún, porque la ciencia ha demostrado que las mujeres embarazadas son más vulnerables a agravarse y morir por covid-19 que el resto de la población. Además, fue una de las poblaciones que más dificultades representó para el Plan Nacional de Vacunación.
Así mismo, el INS señaló que en comparación a los años pasados, el comportamiento de la mortalidad materna no ha mostrado diferencias “estadísticamente significativas” en comparación a los datos recogidos en años anteriores.
Eso sí, han señalado que hay algunos departamentos y ciudades del país donde se registran más casos de mortalidad materna, que está estrechamente relacionada con el acceso a consultas de control prenatal.
“Se han reportado casos de muertes maternas tempranas en 19 entidades territoriales, observando la razón más alta en Vichada, Santa Marta, Quindío, La Guajira, Caquetá, Tolima, Nariño y Meta, con más de 100 casos por cada 100 000 nacidos vivos.
Una prioridad del Gobierno nacional
El Gobierno nacional ha usado la cifra de mortalidad materna para mostrar las dificultades que tiene la población colombiana para acceder a la salud.
“Es importantísimo porque aquí es donde se mide el desempeño integral de un sistema de salud”, indicó la ministra de Salud Carolina Corcho, durante una intervención en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes. Y sostuvo que las mortalidades en las zonas rurales y dispersas son incluso superiores.
“Una mortalidad materna es evitable. Esto quiere decir que con condiciones básicas mínimas de un sistema de salud que tiene que ver con tomar presión arterial, con medir la barriga de la mamá, con escuchar el corazón del bebé, con eso se evitan las mortalidades”, sostuvo la funcionaria.
Por ello, ha argumentado que el país requiere de una reforma a la salud que mejore la prestación de los servicios en las zonas rurales dispersas, donde hay mayores dificultades para conseguir servicios de control prenatal. Pero sus detractores han señalado que el sistema actual tiene herramientas para mejorar esos indicadores.
El Gobierno, a su vez, ha sacado pecho por el descenso en las cifras de mortalidad materna que se registró a finales del año pasado. “Este es uno de los mejores éxitos de mi gobierno al reducir en 4 meses con un plan de choque la tasa de mortalidad materna, uno de los indicadores fundamentales, de la salud”, señaló el presidente Gustavo Petro.
No obstante, los expertos han señalado que los datos que se han recogido y publicado hasta ahora en el sistema de salud son preliminares y que la reducción podría corresponder a múltiples factores que no están necesariamente ligados a la gestión del Gobierno.