La pandemia que atravesó el mundo desde 2020 cambió por completo los indicadores de salud en distintos países y sectores específicos. Uno de los puntos que más llamó la atención fue la mortalidad materna que se dio en aquel año, cuando un gran número de mujeres perdieron la vida durante o tras el embarazo.
De acuerdo con datos que presentó la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 287.000 mujeres perdieron la vida en 2020 por diversas razones durante y después su proceso de gestación. En Colombia esto no varió, pues datos encendieron las alarmas por los resultados inquietantes que arrojaron.
El Instituto Nacional de Salud (INS) indicó en un comunicado oficial que en aquel año que inició la pandemia se presentó exceso de mortalidad materna, específicamente 544 mujeres embarazadas murieron, dejando preocupación al comparar las cifras del año anterior.
El Espectador mencionó “que en 2019 hubo una Razón de Mortalidad Materna de 80 muertes maternas por cada 100.000 bebés nacidos vivos, mientras que al año siguiente se presentó un aumento y las muertes fueron de 87 por cada 100.000 nacidos con vida”.
Según se dio a conocer, esta información del estudio, liderado por el Observatorio Nacional de Salud, fue publicada en la revista British Medical Journal Open. Allí se mencionó el trabajo encabezado por Óscar Castañeda, quien comentó los datos inquietantes que quedaron de sus análisis al detectar que estas muertes eran mayores en zonas y sectores de bajos recursos.
“La pandemia nos mostró cómo los más vulnerables fueron los más afectados. Esto se ha configurado en lo que internacionalmente se ha denominado una sindemia, y hemos visto cómo las desigualdades sociales en eventos evitables y otros en el marco de esta emergencia sanitaria han afectado a los más vulnerables”, reveló en aquel comunicado del INS.
Estas cifras fueron similares a las que dio a conocer la OMS, detectando que ocurría lo mismo en otras partes del mundo donde los ingresos no eran abundantes y limitaban las condiciones de las mamás gestantes.
“Prácticamente el 95 % de todas las muertes maternas en 2020 se produjeron en países de ingresos bajos y medianos bajos, y la mayoría podrían haberse evitado”, mencionó el organismo, agregando en su página: “África subsahariana y Asia meridional representaron alrededor del 87 % (253.000) de las muertes maternas mundiales estimadas en 2020. Solo en África Subsahariana se concentraron aproximadamente el 70 % de estas (202.000), mientras que Asia meridional representó cerca del 16 % (47.000)”.
En cuanto a Colombia, un total de 6.342 mujeres murieron por complicaciones asociadas al parto o el embarazo entre 2008 y 2020, según las cifras que compartió el INS y el ONS. De este grupo, 1.055 mujeres fallecieron entre 2019 y 2020, de acuerdo con lo reseñado por el organismo.
Con esta situación queda clara la necesidad de obtener buenos recursos, atención médica correspondiente y un control en la salud de las mujeres embarazadas, evitando que estos índices aumenten o sean más graves a futuro.
Reducción de la mortalidad materna en el mundo completa ocho años estancada
En un informe, que fue realizado por las Naciones Unidas, quedó en evidencia que alrededor de 4,5 millones de mujeres y bebés fallecen anualmente durante la gestación, el parto o durante las primeras semanas después del nacimiento. En otras palabras, se está reportando una muerte de estas características cada siete segundos.
Lo inquietante de la información citada por la OMS es que se trata de fallecimientos prevenibles que podrían evitarse con atención prenatal y neonatal adecuada.
“Las mujeres embarazadas y los recién nacidos continúan muriendo a tasas inaceptablemente altas en todo el mundo, y la pandemia de covid-19 ha creado más contratiempos para brindarles la atención médica que necesitan”, aseguró Anshu Banerjee, quien funge como director de Salud Materna, Neonatal, Infantil y Adolescente y Envejecimiento en la OMS.
“Si queremos ver resultados diferentes, debemos hacer las cosas de manera diferente. Ahora se necesitan más inversiones inteligentes en atención primaria de la salud para que todas las mujeres y los bebés, sin importar dónde vivan, tengan las mejores posibilidades de salud y supervivencia”, agregó el doctor Banerjee.
Bajo las condiciones globales actuales la OMS señaló que las cifras se han estancado. Desde hace ocho años se siguen registrando cerca de 290.000 muertes maternas, 1,9 millones mortinatos (bebés muertos después de la semana 28 de gestación) y 2,3 millones de fallecimientos en niños recién nacidos (durante el primer mes de vida).